Ad Astra


Ponme una nave espacial contaminando en el despegue y yo salgo por patas para el cine para ver la película, que a mí la ciencia ficción me mola mazo y tanto me da que sea ciencia ficción dentro de cienes y cienes de siglos y en galaxias muy marranas como que sea en un puñado de años en una tierra en la que truscoluña no es nación, como en la película de hoy, que parece difícil de creer pero en ningún momento se habló de los criminales huídos de la justicia. La película de hoy ya le he visto dos veces, se titula Ad Astra y en España se estrenó hace una semana con ese título.

Un julay malcriado se va pa’l quinto coño buscando a su papuchi y definitivamente, sin chimpún

Resulta que un chamo que es astronauta o algo así eligió la carrera porque es lo que hizo su papuchi pero el tipo es raro que no veas, como si le faltara sangre en las venas o no se le oxigene adecuadamente. En estas que se cae de un antenote y después le dicen que tiene que subirse a la luna y desde allí ir a Marte y desde allí al carajo para ir a ver si es cierto que su papi murió hace la tira de años y el chamo sube pa’llá arriba y en la Luna hay mucha chusma y gentuza y camino de Marte se topa con problemas, en Marte no lo tratan bien y todo lo que viene después es como que muy complicado para describir así que hay que vivirlo.

Empezamos con lo peor, el guión, que pese a que cuenta una historia fascinante, a la hora de poner diálogos en ocasiones la cagaron, se notan muy artificiosos y lo otro malo es que a Brad Pitt alguien le dijo que tenía que ponerle una voz distinta a sus pensamientos y le salió el ramalazo de Bat-Man y no veas, cada vez que piensa te chirrían los oídos. Por lo demás es una historia fascinante de ciencia ficción que podría ser real, de viejas por el sistema solar y de los ritmos lentos y diferentes que se tienen que vivir en esos viajes, que pueden tomar semanas o meses y en los que uno tiene que sobrevivir a sí mismo y a los demás. La película es en ocasiones muy íntima y Brad Pitt, salvo por la coña de la voz de su conciencia, lo hace muy pero que muy bien. Los momentos espaciales son fabulosos. A la película le faltó mejorar un poco el ritmo en algunos momentos en los que se frena pero siempre se recupera y pronto te olvidas de esos parones. Para mí la huida de Marte fue lo más flojo y la aventura en la Luna de lo mejorcito.

Este es un tipo de cine lento y raro que no gusta a los miembros del Clan de los Orcos. Sí que puede ser del agrado de muchos sub-intelectuales con GafaPasta.


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