Este es el tipo de documental que más le mola al Ancestral, los de buceo, que son obviamente los mejores. Este documental lo dirige un neerlandés que ha hecho un montón de pelis de este tipo que con los años he ido comentando por aquí y puedo confirmar y confirmo que no siempre me han gustado y algunas las he destrozado. Esta última, metiéndose en el mar, ya tenía por lo menos dos puntos mínimos antes de empezar. El cine estaba petadísimo el domingo cuando la fui a ver, lo cual me sorprendió, pero vamos, es que hay tanta mielda en la cartelera que ya la gente está desesperada por encontrar algo bueno. La película se titula De wilde Noordzee y en España jamás se estrenará, ni como El salvaje mar del Norte ni como truscoluña no es nación.

Un julay está obsesionado con los bichos acuáticos.

Resulta que un panoli neerlandés se fue de vacaciones a Asia o el Caribe, se hizo un curso de buceo por correspondencia y ya se obsesionó con el tema, se compró cámaras y tal y tal y acabó como profesional del tema y finalmente, un director lo contacta para hacer una peli del asunto en la que él es el protagonista.

Tenemos el mar del Norte, entre los Países Bajos, el Reino Unido, Alemania, Suecia, Noruega y Dinamarca y es uno en el que mayormente la gente no bucea porque ese agua es fría que no veas y es un mar muy turbio. El pavo del cámara decide hacer una peli en este barrio y descubrirnos las maravillas del susodicho, no solo bajo el agua, también de pájaros que viven en la zona e iremos por diferentes zonas del mar del Norte encontrando animales increíbles y también descubriremos que en algunas zonas, la prohibición de pescar está trayendo de vuelta animales que se habían extinguido en la zona, como el atún azul, que ha vuelto cerca de Suecia ahora que no los matan. La historia la une el cámara, que también pone la voz en off y durante la hora y media que dura aprenderemos un montón de los animales que frecuentan esta parte del Atlántico, que al final, se mire como se mire, esto es parte del Océano Atlántico. La imagen del póster es con un tiburón peregrino, en una escena increíble y yo dudo muchísimo que llegue a ver uno de esos en mi vida porque son más bien de mares fríos y yo soy de mares cálidos.

Ya al decir la palabra documental salen huyendo aterrorizados todos los miembros del Clan de los Orcos, pero vamos, cualquier sub-intelectual con GafaPasta que se precie seguro que la verá para fardar con sus amistades.