Casi no llego a tiempo para poder ver en el cine la película del año, el peliculón del que todo el mundo habla y que han visto millones y millones de julays. Por suerte la seguían dando en un par de cines aunque en horario algo limitado y tuve que sacrificar un rato de playa para ir al cine al mediodía pero ya sabéis que quien quiere algo, tiene que apechugar. Imagino que habréis adivinado que hoy hablaremos de El Orfanato.

Una julay se compra un chabolo en el quinto coño y le viene lleno de ladillas

Entré en el cine emocionadísimo porque iba a ver la película más comentada y vista de todo el cine español producido en el año 2007. Esto nunca es bueno porque al final ves la película con unas expectativas que no se cumplen. O eso o realmente no me pareció nada del otro mundo. En primer lugar decir que o yo estaba particularmente iluminado ese día o lo veía venir todo con un montón de antelación. No habían sorpresas, no había el factor ese que te deja descolocado y le añade puntos a una peli. Yo sabía como acababa desde casi el principio y nada de lo que sucedió me hizo arquear una pestaña. El componente de cine de terror brilla por su ausencia, no hay nada de eso y los sustos se ven venir con kilómetros de antelación gracias a los golpes musicales que nos avisan que algo va a pasar.

Lo otro que me llamó la atención es el tufo tan intenso a la película The Others. Llegué a plantearme si no sería una secuela porque parecía estar volviendo a vivir esa historia.

En definitiva, no quiero alargarme más porque no merece la pena. Una película más bien mediocre, sobrevalorada enormemente por gente que posiblemente va al cine una o dos veces al año y no han visto muchas otras cosas que están a siglos luz en cuanto a solidez de la historia, calidad de las interpretaciones y realización.