Festival de tiburones grises y dos inmersiones relajadas


Parece que fue esta mañana pero ya llevo cuatro días Buceando a tiempo completo en Fulidhoo y como siempre, conoces gente por el camino y como son buceadores, terminas pasando el tiempo con ellos. La idea de hoy era ir al mismo sitio que intentamos ayer por la mañana y tuvimos que cancelar por mal tiempo pero hoy las corrientes eran aún más fuertes, así que cambiaron el plan y fuimos a Miyaru Kandu, y antes de eso, jiñote, desayuno, fotos idílica de la playa y dejé todo mi equipaje empaquetado porque me cambiaban de habitación, que cuando reservé tenía cuatro noches en un tipo de habitación y dos en otro tipo, así que ahora estoy en la planta baja y con vistas al mar y la calle. Se marchó gente, dos alemanas, un suizo y los españoles y los han sustituido otra gente, un grupo de polacos que  me dijeron que hace cuatro días estaban en Alicante, cerca del desastre, dos gringos y otros dos gringos que están haciendo un curso y no hablan con nadie, aunque es su primer día y después se sueltan.

Cuando llegamos al lugar de la primera inmersión, explicaron que es con corrientes fuertes, usamos los ganchos para que no nos arrastre y habrán tiburones. Nos dividieron en grupos según la experiencia y nos tiramos al agua. A mí me tocaba con los polacos. De camino al canal, que es uno de los puntos de salida del agua del Atol hacia el océano Índico, y que por eso hay corriente, vimos tres mantas pasando, entrando en el Atol. Después descendidos y llegamos a una planicie y allí estaban los tiburones grises, solo que igual porque la corriente era muy fuerte, estaban super-hiper-mega cerca de nosotros y prácticamente, estaban paralelos a nosotros, como habrán visto todos los que se molestaron en mirar los vídeos en alguna de las tres formas en las que están disponibles. Estuvimos allí hasta que hubo gente o con poco oxígeno en sus tanques de aire enriquecido, o con poco tiempo a esa profundidad. En mi caso, yo tenía aún doce minutos y medio tanque y el plan del Dive Master era que nos quedáramos yo y una polaca con él, pero ella como que no captó el concepto  y se soltó y ya nos tuvimos que ir nosotros también. Vimos unos pececillos de las Maldivas pequeñitos y que tienen como un espolón grande que les sale de la frente y que cuando se asustan se esconden en un agujero que tienen cerca, en español se llaman gobio dardo de fuego o gobio espada.

Al salir, el barco comenzó a cambiar el escenario para la segunda inmersión mientras algunos tomábamos el sol en la cubierta superior y en el camino, nos cruzamos con un grupo de delfines, que cuando ven el barco siempre salen a la superficie a saltar y saludar.

Nuestra  segunda inmersión era en un pináculo llamado Kaulhu Thila, pequeño. Comenzamos bajando a diecisiete metros y había muchísima vida pequeña, pero que muchísima y los corales y las algas estaban muy bien. Volví a ver los agobios dardo de fuego porque el Dive Master, al que le había preguntado el nombre, cuando los vio me avisó. También habían crías de todas las especies locales, una morena y una actividad frenética, con pez comiendo pez, algas y demás, era como la hora punta. El sitio es muy bonito y la inmersión a mí me gustó bastante. Al salir, regresamos a Fulidhoo y para la inmersión de la tarde, como siempre, seríamos menos. En esta inmersión también vi un pez halcón de nariz larga, peces del océano Índico y Pacífico que se esconden entre las Gorgonias y los corales negros y parece un pajarito. El ejemplar que vi debía tener unos 9 centímetros, con lo que era adulto. Son muy bonitos y especiales y nadie más los vio, cuando les enseñé el vídeo fliparon y les dije que como ninguno me hizo caso y todos se piraron y  me dejaron a mí por allí, se lo perdieron, así que fue su culpa, su culpa, su grandísima culpa. Por supuesto algunos que leen esto ya vieron el vídeo en mis redes insociales.

La inmersión de la tarde, la tercera, era en un lugar relajado y poco profundo llamado Kuda Fushifaru, no es un pináculo porque la parte superior es plana, es más bien como una isla a la que le faltaron unos metros para salir del agua y ahora con el cambio climático que muchos niegan, ya no llegará a la superficie jamás. Había un grupo de gente haciendo un bautismo de buceo, que es para los que tienen curiosidad por saber como es pero no quieren hacer todo el curso y les Dan un rato de explicaciones y los bajan a 12 metros a mirar. También habían dos que están haciendo un curso de Aguas abiertas y que llevan con nosotros desde ayer por la tarde, con lo que deben estar a puntito de acabarlo y finalmente, yo y un alemán que se está quedando donde yo me hospedó y que llegó a la isla ayer, mandó a su hembra a la playa de bikini y él se fue a bucear, pero es algo que hace muy de cuando en cuando. La profundidad máxima que hice fue de dieciocho metros y salí del agua con medio tanque, con lo que fue un paseíllo relajado.

Vimos una morena muy chula, dos gobios dardo de fuego que por supuesto se escondieron en su agujero cuando nos acercamos, bancos gigantesco de peces, muchas algas y corales y muchos peces pequeñitos entre ellas y también vimos varios peces ballesta, que esos son dañinos y yo los evito siempre que puedo. 

Cuando regresamos, me fui a la playa un rato, pero antes de eso pagué lo que debía al Club de buceo y me dijeron que al día siguiente, en lugar de dos inmersiónes, serían tres, ya que por la tarde volvían al lugar de los tiburones nodriza, así que me apunté a esa también, que igual no vuelvo a ver esos bichos en mi vida y Genín no me perdonaría que no tenga suficientes vídeos de los susodichos. Al final convencí a los alemanes para que se vuelvan a Ma?é conmigo y vayan a bucear allí conmigo, con lo que el sábado, que iba a estar solo en la capital, estaré con los coleguillas.

Por la tarde, la cena habitual mirando hacia el mar y viendo a los tiburones nodriza rondar la playa esperando que alguien les tire cachos de pescado y después, a la cama, que lo bueno de hacer tres inmersiones al día es que duermes como un bellaco y jiñas cantidades asombrosas y frecuentes, que Buceando no hay manera de tupir retrete como hacía antes porque las compresiones y descompresiónes te dejan el jiñote muy ralo. Es  lo que hay.


Una respuesta a “Festival de tiburones grises y dos inmersiones relajadas”

  1. Yo que tu me haria una funda de metal, como la de los puros habanos para asegurarte de no perder la salchicha… 🙂
    Salud

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