De todas las cervezas Bok, la que tiene el vaso más espectacular es la Leute. El vaso es redondeado en su parte inferior y la tienes que apoyar en el pequeño soporte de madera que te traen. Los vasos parecen siempre a punto de caerse o derramar el contenido pero el sistema funciona muy bien. La cerveza en sí no es una de mis favoritas pero los vasos me gustaron tanto cuando los descubrí en el año 2006 que no tardé en agenciarme tres de ellos y siguen en mi casa tras todos estos años. La Leute bokbier es belga y tiene el sabor característico de las cervezas de otoño de ese país, un poco menos dulzón que las holandesas y no tan adictiva. El porcentaje de alcohol es de 7.5% con lo que queda lejos de las campeonas de 9% o más. La Leute resulta muy difícil de avistar en bares y supongo que la causa es los vasos tan particulares que tiene. En las tiendas de venta de alcohol sí que la veo con frecuencia pero como no es una que me llame excesivamente la atención, suelo ignorarla. Su color es bastante oscuro, como se puede ver en la foto, la cual ya apareció anteriormente en esta bitácora en octubre del año 2006, prácticamente ayer mismo o sea, hace poco más de seis años. Si queréis ver una foto del vaso alzado, la encontraréis en la anotación Cervezas y nórdicos con magia latina, la cual asumo que todos habéis leído una y hasta dos veces ya que aquí todos somos fans.
7 respuestas a “Leute Bokbier”
Pues yo no la había leído (no estaba por aquí en ésa época), y me ha dado mucha pena lo de la Macarena. Aunque ya sea agua pasada…¿Cómo fue su despedida?…¿Tuvo un buen desguace?…
Se me ha olvidado decir que el vaso me gusta mucho; dan ganas de tener uno en la mano (aunque no me beba la cerveza).
Aunque no se parece a ese, yo me traje un artilugio de madera de Bruselas que servia para sujetar un vaso muy alargado y con culo totalmente inestable, vamos que sin el chisme de madera no se aguantaba.
Se lo regalé a mi vecino, y tiene merito porque no los venden, los tienes que robar, claro que yo no lo hice, soy inocente…
Salud
Genín, si el vaso parece como un alambique con un armazón de madera que lo sostiene, es de una cerveza belga y sí que se vende. En el Café Olivier en Utrecht se puede tomar esa cerveza. La próxima vez que vaya la pido para hacerle la foto al vaso.
Huitten, la Macarena me limitaba mucho. No tenía velocidades y era más pesada que una gorda de Vecindario. Cuando la cadena dejó de agarrarse a los piñones y le faltaban más rayos en las ruedas que dientes a un octogenario (y tenía una medida rarísima que no se conseguía). La abandoné en la estación de Utrecht Centraal y al día siguiente había desaparecido, así que alguien la cogió.
La Dolorsi ha rodado miles y miles de kilómetros y está cascadísima pero sigue pa’lante. Creo que ya lleva 5 cambios de piñones y cadena (y el sexto está cerca), ya ha recibido un par de rayos en la rueda trasera, le he cambiado los neumáticos al menos dos veces a cada rueda y ha tenido una buena tanda de pinchazos. Además, debe haber gastado una cantidad asombrosa de zapatas de frenos.
Pues si que era algo parecido a lo que describes si…
Bueno, me salió barato y lo invertí en mas liquido…jajaja
Salud
¡Mira que abandonarla!… ¡Qué penita me ha dado!… La podías haber guardado (a piezas), para darle la oportunidad de convertirse en otra cosa, y seguir viviendo.
Ya sé: No podemos guardar todo lo que ya, aparentemente, no nos sirve, bla??bla??bla?? Pero tratándose de un objeto que ha cargado con nuestro peso, y nos ha ayudado a llegar a todos los sitios que hemos deseado, habría que recompensarle de alguna manera. Yo, a los coches de los que me he tenido que despedir (menos los que he vendido) les he sacado todas las cosas que podían servir para algo (es decir: que estuvieran en buenas condiciones) y les he dado una nueva salida.
Bueno, de todos modos, ¡Qué descanse en Paz la Macarena!…
Huitten, no la abandoné. Le di la libertad y ella encontró otra casa. Igual ellos estaban dispuestos a gastarse los cincuenta o sesenta euros que iba a costar ponerla a punto.