Living


Mi primera visita a la filmoteca fue para ver un drama británico que al parecer está basado en un guion de una película japonesa de los años cincuenta del milenio y siglo pasado. En esta versión, también la ambientaron en la misma época, solo que en los alrededores de Londres. Como el protagonista es un actor inglés que me gusta mucho y la alternativa era ver una película de Dios sabe dónde con subtítulos en neerlandés, fui a ver Living, la cual parece que se estrenó esta semana en España con el mismo título, que se puede traducir perfectamente como truscoluña no es nación.

Un julay avejentado con un sinvivir, cambia su actitud cuando le diagnostican truscolanismo con retazos de podemismo.

Tenemos un pavo que todos los días hace exáctamente lo mismo, va a Londres en tren, llega a su oficina en el ayuntamiento y hace sus horas antes de volver a su keli, en donde vive su hijo con la nuera porque no se han podido comprar su propia keli. Cuando al chamo le dicen que tiene un cáncer terminal, se trastoca y cambia su actitud, descubriendo que no ha vivido porque no ha querido y haciendo cosas que todos ven extrañas y de alguna manera, redimiéndose a sí mismo.

Este es un precioso drama que cuando empieza, engaña porque parece que el protagonista será un joven en su primer día de trabajo y después cambia totalmente y Bill Nighy toma el control y nos lleva por su mediocre vida, por su falta de relación con su hijo y su nuera, vemos como afronta descubrir que ya va a morir y como empieza a cambiar y en lugar de apoyarse en su familia, lo hace en una joven que trabajó con él y que es la única persona que sabe lo que le está pasando. En sus meses finales, hará algo bueno por la comunidad de un barrio londinense, un parque para niños y muchos descubrirán que el hombre, después de todo, tenía corazón. La película está muy bien llevada, recibimos la información justa en los momentos oportunos y en cierta medida, escuchamos a todos los secundarios dar sus opiniones y explicar cosas que más tarde, cuando ya ha muerto, permiten ver que la información estaba ahí, solo que nadie la quería ver. La fantástica Aimee Lou Wood borda su papel como la joven que abandona el trabajo en el ayuntamiento por ser aburrido y que después tendrá una preciosa amistad con el moribundo.

Esto es un drama y como tal, aterrorizará y espantará a los miembros del Clan de los Orcos, que huyen de estas cosas. Seguramente interesará y gustará a los sub-intelectuales con GafaPasta.


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