Cuando salgo a hacer fotos con mi amigo el Moreno muchos pueden pensar que con mi equipo llamo la atención pero lo cierto es que paso completamente desapercibido porque no puedo competir con la herramienta de ese hombre. Tanto su cámara como su objetivo estrella están en otra liga. Por otra parte al menos yo no tengo que cargar esos armatostes porque su objetivo de 500mm es como un cañón y la cámara abulta dos veces el tamaño de la mía.
La foto la hice un día que fuimos a hacer fotos de un pájaro muy especial que vive en Huizen pero no tuvimos suerte y no dimos con el bicho. La gente cuando ve esa cosa monstruosa se acerca con curiosidad a mirar lo que hacemos y si fueran españoles y malhablados seguro que dirían: La madre que me parió
Ya nos hemos apuntado para un safari fotográfico de ciervos en un parque nacional holandés y cuento los días que faltan para dicho evento (es en Agosto). Mi amigo consiguió plaza el año pasado y me dijo que fue una pasada, que vieron cientos de ciervos correteando alegremente y ajenos a los visitantes. A ese lugar solo se puede entrar con un permiso especial, con un guía y únicamente hay seis sesiones cada año para cinco personas, así que creo que somos dos de los treinta privilegiados que tendrán la oportunidad de verlo.
Antes de eso estamos intentando inscribirnos para un workshop de fotografía Macro impartido por uno de los mejores fotógrafos holandeses. Si cuadra y nos acepta pasaremos un día completo con este hombre tirados en el suelo y haciendo fotos a pequeños bichos, serpientes y demás. Costará una pasta gansa pero al menos servirá para que uno aprenda a domar la cámara y sacarle algo de partido con trucos y tretas que si no te las dicen no las descubres en tu vida.
Además de esto en mayo espero poder visitar un lugar que hay al norte de Ámsterdam y en donde por una módica cantidad te permiten caminar durante cinco kilómetros en campos de flores infinitos y perderte por ellos haciendo fotos que reventarán de colores vivos.
Y mientras tanto tengo literalmente miles de fotos que esperan su correspondiente procesado y catalogación. Entre ellas están las que hice en Washington D.C., la gira turística por Kinderdijk, Delft y Gouda, las fotos de tulipanes de este año en el Keukenhof, mi viaje a Salamanca, Segovia y Ávila, el viaje de marzo a Gran Canaria y las del día que estuve de paseo por el sur de Utrecht. Si me sentara y me pusiera a prepararlas todas, creo que pasaría al menos una semana a tiempo completo antes de finalizar y con el buen tiempo que tenemos y mi intensa vida social, me temo que tendrán que esperar a que lleguen las lluvias.