Distorsiones

Ayer comenté la última película que me quedaba del año 2024 y hoy comenzamos el 2025 con esta película, que además vi en Gran Canaria porque era la única que ponían en versión original y todos sabemos que la regla es ver cine en español o en versión original, que yo ya conozco las voces de los actores en inglés y tengo muy poca tolerancia para los doblajes españoles, que no son tan buenos como muchos creen. La película se titula Queer y en España se estrenó con el mismo nombre, porque en el póster no les cabía truscoluña no es nación.

Dos julays julandrones julandrean que no veas.

Tenemos que un maricón viejo vive en México, en donde se emborracha a diario y busca macho que se la empete o al menos que se la deje mamar. En eso que conoce a un joven gringo y se encoña todo de él y el otro como que se deja querer y que le pague los vicios pero nada, pasando del viejo, que se rechifla que no veas y se le radicaliza el mariconeísmo. Después el viejo decide irse de viaje a sudamérica e invita al otro a irse con él y bueno, más de lo mismo con viajes astrales.

La película está organizada en capítulos y bueno, los dos primeros no funcionaron nada para mí, con el mariconeo mexicano. Eran una sucesión de borracheras de Daniel Craig, que va pasadísimo de mariconeo. En realidad, la historia se vuelve interesante cuando se van de México, momento en el que descubrimos que el viejo es heroinómano pa’l coño, además de borracho y fumador. A partir de ahí, sin la interferencia de las historias absolutamente no interesantes de los otros julandrones, la película se centra en estos dos y gana un montón. En el tramo final los tenemos en la selva, buscando ayahuasca para darse un viaje, y toda esta parte es fantástica, incluyendo a la científica que los introduce a la droga esa, con la que tienen un viaje fabuloso. Después hay un salto temporal para terminar la historia que personalmente se lo podían haber ahorrado.

Prohibida para los miembros del Clan de los Orcos. Probablemente interese a los sub-intelectuales con GafaPasta.

La última película neerlandesa que vi en el 2024 fue también la última peli que vi antes de migrar a Gran Canaria. Como se puede ver en el cartel, es un amasijo de hembras, en diferentes edades y todas buscan lo mismo, chimpún y felicidad o algo así. En la peli hay machos pero como que no se merecen el dudoso honor y el privilegio del póster, porque se vende como peli para portadoras de hachazo, aunque curiosamente, tuvieron que elegir a un hombre para que dirigiera esto, que se titula Schitterend y jamás se estrenará fuera de este país, ni como Maravilloso ni como Truscoluña no es nación.

A un montón de julays les pica el chichi que no veas.

Tenemos un puñado de hembras en diferentes fases de su chifladura. La vieja está jubilada pero quiere que su macho le de candela de la buena sin parar. Otra tiene veinticinco años, es modelo y ya no la llaman por vieja y obesa, otra acaba de parir y tiene depresión post-parto o algo así, una joven quiere que la invite a salir un pavo y le coma el potorro o algo así y de la otra no me acuerdo que más. Esto es básicamente como Love, Actually, pero con hembras solo y supuestamente entrelazando las historias al final de la película.

Con tantas historias para contar, al final es que encuentras quizás una interesante y un montón aburridas o abiertamente malas. En mi caso, la de la modelo me pareció una mielda de historia y la de la vieja, también. Me quedó claro desde el principio que no se hizo pensando en hombres y consiguieron que me desactivara por completo y entrara en modo siesta. Cerca del final, acaban todas las hembras en la misma keli, en una celebración, en la escena que supuestamente lo enlaza todo y que se nota muy forzada. Da un poco de pena que hayan masacrado un clásico de la comedia romántica, hayan pretendido hacer una versión más femenina y hayan conseguido terminar con este pedazo de mielda.

Esto unirá en su rechazo a los miembros del Clan de los Orcos y a los sub-intelectuales con GafaPasta. Ambos grupos la odiarán por igual. Para hembras descerebradas y con una necesidad imperiosa de un pepino.

Esta es una que me confundió. Supuestamente esta es una peli de super-hiper-mega héroes, pero el chamo no me queda claro si es bueno o es malo o es peor o es podemita, truscolán o suciolista o todo lo anterior. Si capté el concepto bien, este carácter es un malo de Spider-man, pero vete tú a saber, que yo no leo cómics, que ya me torturan bastante con las películas y con eso tengo suficiente. La cosa se titula Kraven The Hunter y en España se estrenó con el título de Kraven El Cazador, que no tiene mucho gancho, como podría haber sido con truscoluña no es nación.

Un julay está emparentado con el Güaca y todo su clan de jinameños.

Hay un pavo que al parecer es ruso y que tiene un padre que es un malaje que no veas y un hermano que no se sabe muy bien si es julandrón, amanerado o subnormal, pero vamos, que hay algo podrido en su sangre. El pavo se cansa del padre y se marcha de la keli, se va a Siberia y allí se convierte en un cazador dañino que no veas después de que una hembra le diera una poción mágica de la bruja Avería. En eso que hay alguien que lo quiere matar o así y el chamo investigará o algo parecido y eventualmente, encontrará a la que le dio la poción y su hermano se pasará al reverso zarrapastroso de la fuerza, o quizás eso no sucedió y mi cerebro se lo ha inventado.

Al igual que en los cómics, aquí los personajes no tienen profundidad alguna, son caricaturas de humanos, que dicen polladas y hacen polladas. El que escribió los diálogos definitivamente debería haberse hecho carnicero, porque es buenísimo destrozando cosas. Hay efectos especiales baratos y aún más baratos, sobre todo con un león o algo así y tenemos que a ratos el chamo es super-hiper-mega fuerte y después, el padre le da un bofetón y lloriquea como perra truscolana en busca de subvención. La capacidad de retención de la historia cuando sales del cine es bajísima, no has llegado a la puerta y ya lo estás olvidando todo. Decir que los acentos rusos son T-E-R-R-I-B-L-E-S, especialmente el del mórbido de Russell Crowe, que debió comerse un cochino antes de rodar y no le dio tiempo a hacer la digestión. La peli dura más de dos horas y le sobran claramente unos cuarenta minutos y definitivamente, podrían haber usado el dinero que se ahorraban en todo eso para mejorar el puto león digital y tal y tal.

Esto es cine para los miembros del Clan de los Orcos, aunque no sé por qué, hasta ellos la verán como estúpida. Prohibida para los sub-intelectuales con GafaPasta.