Distorsiones

Esta es una peli que después de ver el tráiler dos veces, consideré seriamente no ir a verla porque me daba un mal rollo que no veas y total, el único que se emperra con este tipo de cine es Doverinto y seguro que ni nota que no la comenté pero al final, no había nada más en el cine, todavía no sabía si iría a la filmoteca en Ámsterdam y decidí darle una oportunidad. La película se titula The Phoenician Scheme y en España se ha estrenado con el título de El esquema fenicio, que hasta Merillein piensa que le falta el atractivo de una frase directa como truscoluña no es nación.

Un julay desquiciado se pasea con la penca de su hija.

Un panoli multimillonario tiene una hija monja y un montón de hijos pequeños y nombra a la hembra la HEREDERA. Está montando un proyecto que supuestamente les dará unas riquezas ingentes a lo largo de ciento cincuenta años y va con la hija a hablar con cada uno de sus socios mientras lo intentan matar continuamente y él escapa a todos esos asesinatos y sigue erre que erre con el plan o algo parecido.

Intentar comprender la trama de esta peli es absurdo y da tantas vueltas y tiene tantos giros que jamás sabrás de qué trataba, pero eso no importa porque pronto te das cuenta que esto es una especie de sátira de los billonarios oligarcas actuales y de cómo se creen seres superiores que pueden hacer lo que les sale de los mondongos por su dinero pero no dejan de ser mentecatos. La película tiene un montón de momentos cómicos y reconozco que me reí y que pese a que pensaba que me aburriría y me dormiría, me lo pasé muy bien en el cine con todas las chorradas. Está llena de famosos y sin embargo, la actriz que más me gustó es Mia Threapleton, que para mí es una desconocida y aquí hace de la monja que acaba metida en todo tipo de crímenes. Sigue siendo cine de Wes Anderson y recuerda muchísimo a sus pelis anteriores, con lo que está claro que si te gusta su cine, la disfrutarás y si no, mejor ni entras a la sala.

Esto está vetado, prohibido y fuertemente desaconsejado para los miembros del Clan de los Orcos. Es cine con los sub-intelectuales con GafaPasta en mente y muchos se lo pasarán bien viéndola.

Aunque sé a ciencia cierta que vi la película original, no estoy tan seguro de haber visto las secuelas que hicieron, aunque sí recuerdo que hace quince años vi The Karate Kid y me pareció flojilla y puedo confirmar y confirmo que no sigo ninguna serie sobre el tema, que al parecer las hay. Con cierto recelo fui al cine a ver Karate Kid: Leyendas y al parecer no llega a España hasta agosto, con lo que toca agarrarse los machos y esperar para poder deleitarse con Karate Kid: Leyendas, que en tantos meses igual deciden cambiar el título y llamarla truscoluña no es nación.

Un julay k-bezudo se lía a hostias con otro panoli de barriada periférica.

Resulta que el chino Kudeiro está deprimido o algo así porque al hermano lo mataron de una paliza y la madre lo obliga a emigrar a Nueva York y allí se encoña de la vecina y se encariña del papuchi de la susodicha e intenta ayudarlos a arrejuntar dinero para pagar deudas con un criminal o algo así y cuando el plan falla tiene que entrar en una competición de karate o similar que gana siempre un panoli que resultó ser el ex de la vecina de la que está encoñado y para preparalo, su entrenador chino le pide ayuda al panoli de la película original o algo así y todos gimen que no veas y dan golpes al aire pero esta vez no limpian ventanas y claro, al fnal gana el bueno y todo el mundo se emociona hasta las lágrimas.

Siendo como no soy seguidor de la serie telelevisiva o super-fans de las pelis originales, para mí lo cierto es que se pegan como cuarenta minutos al comienzo de la peli en los que pasa muy poco y de repente, se olvidan de todo eso, juntan a los dos maestros de artes marciales, uno con Karate y el otro con Kung-fu y la película cambia a otra en la que hay una pelea, que por supuesto vemos a cámara lenta y estirándola, estirándola, estirándola para que todos podamos apreciar hasta el milisegundo la belleza de estas artes marciales. El resultado es que la historia flaquea, tiene unos agujeros enormes y el protagonista carece de carisma y los viejunos que trajeron, tanto de la peli original como de la de hace quince años, tienen papeles mediocres y pequeños que no funcionan porque en ningún momento se trataba de hacer una peli con ellos. El pasado, fuera el que fuese, está olvidado y vivimos en el presente del cabezudo chino que en una semana recibe un curso intensivo de artes marciales en una azotea y gana una competición, o algo así y todos se emocionan hasta las lágrimas celebrando tremendo éxito.

Por la forma en la que escribieron y ejecutaron el guion de la peli, es muy simplona y teniendo siempre presente las graves carencias intelectuales de los miembros del Clan de los Orcos, que igual responden bien a esto. Puede provocar daños cerebrales severos a los sub-intelectuales con GafaPasta. No creo que merezca la pena ni verla en la tele, salvo que tengas insomnio y necesites algo para noquearte.

No tengo ni puta idea del ciclo que están haciendo en el cine de clásicos, pero parece que son comedias románticas, aunque los protagonistas van cambiando. El domingo de la semana pasada tocaba una que todos consideramos un clásico, aunque está por ver si pasará la prueba del tiempo. La película es You’ve Got Mail y en España esta se conoce como Tienes un e-mail, aunque creo que inicialmente la estrenaron con el título de truscoluña no es nación.

Una julay se encoña de un panoli por la internetes, pero sin chimpún y otro panoli le toca el mondongo hasta emputarla que no veas.

Tenemos que una panoli lleva una librería en un barrio de Nueva York y en la misma zona va a abrir una cadena de librerías de esas que parecen hipermercados. Conoce al director de la susodicha, al que odia inmediatamente, pero al mismo tiempo está intercambiando correos electrónicos con otro panoli y prácticamente teniendo un romance secreto sin sexo con el susodicho sin saber que es el panoli ese que le cae mal, aunque él llega a descubrirlo y se lo calla. Al final el negocio de la pava se arruina y por supuesto, acaba despatarrándose para que el otro le coma el chichi o algo así.

Lo que hace funcionar esta película es la química entre Tom Hanks y Meg Ryan, que están fabulosos, sobre todo ella, que esto se hizo cuando estaba en la cima absoluta de su carrera y todo lo que hacía era maravilloso. En lo relativo al guion, la película es más bien simplona, es una historia muy corta y que estiraron hasta las dos horas pero que podrían haber dejado en hora y media. Las escenas entre Tom Hanks y Meg Ryan son fantásticas, pero de cuando en cuando solo tenemos a uno en pantalla, con algunos secundarios y la película pierde el ritmo. El final, cuando ella descubre la traición de él y al mismo tiempo se enrolla con él me pareció un poquito forzado, seguro que podrían haberlo hecho muchísimo mejor, pero bueno, salí contento del cine, que es lo que importa y hoy en día no se hacen películas así, lo cual se nota cuando la sala del cine está petada de gente.

Vetada para los miembros del Clan de los Orcos y probablemente considerada muy simple tirando a simplona por los sub-intelectuales con GafaPasta.