Pastel de arándanos azules con suero de mantequilla y limón


Llegué a la receta de hoy por casualidad. La asistente del presidente de mi empresa está de baja por maternidad y han contratado a una substituta para los meses en los que no veremos a la otra. Desde el principio conectamos porque nos gusta cocinar y comer y nuestras conversaciones giran siempre en torno a la comida. En una de ellas me dijo que me iba a pasar una receta increíble que tenía que probar y me mandó un correo con dos enlaces. La receta que ella mencionaba no me pareció gran cosa pero la otra me fascinó e inmediatamente decidí probarla. Fue un exitazo. Es un pastel muy fácil de preparar, muy sabroso y muy sano y en el que el ingrediente principal son los arándanos azules, una de mis debilidades. La primera vez que lo hice me lo llevé a casa de mi amigo el Rubio y lo devoramos en el postre acompañado de helado. Esta receta me ha servido también para descubrir el suero de mantequilla, el cual se encuentra fácilmente en Holanda y que a mí no me gusta nada, pero cuando lo uso para cocinar se transforma y le aporta un sabor riquísimo a los dulces (he probado a sustituir la leche por suero de mantequilla en mi receta de magdalenas y quedan aún más ricas). La receta la saqué de aquí.

Los ingredientes: 115 g de mantequilla sin sal que esté fuera de la nevera, 175 g de azúcar, 125 ml de suero de mantequilla, 300 g de arándanos azules, la ralladura de la cáscara de un limón, 1 huevo grande, 250 g de harina (210 + 40), 1 cucharadita de extracto de vainilla, 2 cucharaditas de levadura química (baking powder), 1 cucharadita de sal.

La implementación: Ponemos a calentar el horno a 180 ºC sin ventilador. Mientras, mezclamos en un bol la mantequilla con la ralladura del limón y el azúcar. Añadimos el huevo y el extracto de vainilla y seguimos mezclando hasta que combine. En otro bol mezclamos 210 g de harina con la levadura química y la sal y la vamos añadiendo a la mezcla previa poco a poco y alternando con suero de mantequilla. En un recipiente separado mezclamos los arándanos azules con 40 g de harina y los añadimos a la mezcla poco a poco y procurando no destrozarlos.

Engrasamos con mantequilla o aceite una bandeja de cristal de 20×20 (o una similar) y echamos en ella la mezcla. Espolvoreamos por encima con una cucharada de azúcar y horneamos durante cuarenta y cinco minutos. Pasado este tiempo picamos con un palito de dientes y si no sale limpio lo dejamos unos minutos más. Lo dejamos enfriar y está listo para servir.

Es delicioso para desayunar o para llevarte un trocito y tenerlo como tentempié y por suerte se puede meter en una bolsita de plástico y congelar. Como ya comenté al principio, también puede acompañarse de helado y de cualquiera de las maneras, estará delicioso.

Si quieres ver otras recetas que he cocinado puedes ir al índice de Mi pequeño libro de recetas de cocina y allí tienes la lista completa


4 respuestas a “Pastel de arándanos azules con suero de mantequilla y limón”

  1. No sé cómo lo haces…pero cada vez que leo una receta escrita por ti, me da la impresión de que es facilísima de hacer. Parece mentira lo que se puede conseguir dependiendo del modo en el que se cuenten las cosas

  2. Desde que la leí, me encanto!!! buenísima la receta, hice unos cambios como:
    «buttermilk» fue Low fat Culture porque no había otro en la tienda, use «bread pan» de 9x5x3, el horno estuvo en 356C por 55minutos…. la masa levanto y salio esponjoso… Perfecto… It’s a keeper!

  3. Me sorprende que no haya buttermilk en América. Lo que sí tenéis son los mejores arándanos azules del universo. Yo me encochináis todos los días a helado con arándanos en los veranos que pasé en casa de Cheo. No se sí lo comente en la receta pero con cling film se puede congelar y este verano probare a hacerlo con moras, con fresas y con lo que se tercie