Planeando nuevos viajes


Este mediodía estaba paseando por el bosque cercano a mi oficina a la hora del almuerzo y disfrutando del brusco cambio de temperatura que nos ha puesto a las puertas de lo que los holandeses denominan verano y que solo ha durado dos días. En mi cabeza circulaba el batiburrillo habitual de pensamientos y como estaba buscando la manera de contar algo relativo al reciente viaje a Venecia, tropecé con el futuro. Normalmente comento los viajes que he realizado, las películas que he visto y las cosas que me suceden y pongo fotos de esos sitios ya visitados pero esto es solo una parte de mi vida. La otra es la que mira hacia el futuro, la que otea más allá de la línea del horizonte y trata de encontrar lugares a los que ir para poder continuar contando el relato, mantener el libro inconcluso y que siga creciendo ya que más de seis mil anotaciones no son suficientes. Ayer mismo hablaba con mi amigo el Turco y de esa conversación surgía la compra de un billete de avión para ir a verlo próximamente. Con el Rubio estoy planeando también una escapada esta primavera y como queremos combinar la actividad con el deporte (concretamente el ciclismo) y no buscamos un sitio muy alejado de nosotros, hemos decidido ir a algún lugar de Francia. Estamos a menos de tres horas de la frontera con ese país e iremos con su coche ya que así tenemos libertad completa de movimiento por no mencionar la gasolina gratuita de su coche de empresa. El Rubio se encarga de seleccionar el sitio en base a lo que queremos hacer y como yo no me fío de él ni un pelo y no quiero acabar en cualquier antro, me encargaré de reservar el alojamiento. Para otros puede que esto sea algo banal y no prestan demasiada atención pero cada país tiene sus peculiaridades y según el lugar al que quieres ir merece la pena cambiar tus hábitos y así mejorar significativamente el resultado que obtienes.

Tras una intensa búsqueda hemos encontrado el lugar en el que están las mejores ofertas de hoteles baratos en Francia y a veces alucino como por no molestarte en mirar alternativas como ésta, terminas pagando un montón de dinero más. Si todavía piensas que todos ofrecen lo mismo, abre los ojos y espabila porque estás muy equivocado. Cuando tengamos claro el fin de semana y el lugar al que queremos ir, buscaré el hotel apropiado. Después, viviremos alguna aventura fascinante que debidamente distorsionada pasará a formar parte de un nuevo capítulo de mis aferes por este planeta.

Mi visita a Turquía será la primera a la nueva casa de mi amigo, ya que se ha mudado al lado asiático de la ciudad y ahora tiene una keli como la de la Preysler, con mármoles y todo, piscina, sauna y vete tú a saber qué más. Yo ya le he dicho, por si está maquinando algo, que en la cocina sí que trabajo pero en el jardín, NO. Comenzamos nuestra negociación para visitarlo por teléfono, la continuamos por correo unos días más tarde y ayer le mandé un mensaje con los días y el vuelo que quería ir a Estambul. El Turco no me respondió, pasaron las horas y cuando finalmente lo hizo, fue un mensaje contundente: YES YES PLEASE come. A ese le siguió otro en el que me comunicaba que su agenda estaba bloqueada, que su mujer, su madre y su hija ya estaban informadas y que su secretaria se encargaría de mandar la limusina al aeropuerto para recogerme.


6 respuestas a “Planeando nuevos viajes”

  1. Francia la tengo yo también en el punto de mira, pero aquí hay batalla. La jefa quiere zona de glamour (Niza, Saint Tropez y la Provenza) mientras que a mi me tira más la naturaleza de Bretaña y Normandía. Las dos zonas me parece que tienen un montón de cosas que ver. Eso para echarse unos días, que relativamente cerca mía está la zona de Capbreton a Burdeos y La Rochelle, bastante maja también. Cuando vayas anticipa un poco qué tal fue la cosa…

  2. También Francia está en mis pensamientos. Lo que pasa es que, antes de hacerme vieja del todo??, quiero visitar el norte de Europa (por aquello de las horas máximas que mis piernas aguantan dobladas). Me falta Finlandia e Islandia; y es a donde me gustaría ir en mi próximo viaje. Así que los pueblecitos franceses, los disfrutaré(si todo va bien) con un poco más de madurez física y mental.

  3. Ahora mismo estamos pensando en cambiar la ruta y en lugar de ir a Francia, irnos a Estambul y corrernos la juerga del milenio con el Turco.

  4. La combinación del Turco con el Rubio puede ser algo antológico. Lo peor es que a mí me pillará en el medio y seguro que ambos me culpan de lo que quiera que sea que hagamos y después sus parientas me echarán las broncas a mí por pervertirlos. En fin, pese a todo, seguro que nos divertimos una jartá