Salt


Pon a una chocha a repartir hostias en una película de acción y consigues llenar los cines. Los tíos ya sabemos la razón por la que acuden y las tías van engañadas pensando que ella va a ser sensible y modosa como ellas y cuando descubren la dura realidad se pasan la película mandando mensajes y revolviéndose inquietas en sus asientos como si las ladillas que portan las están picando. Si la chocha es Angelina Jolie también conocida como la madre Mastercard porque como dice el anuncio ?? para todo lo demás ?? y tenemos la película Salt que a España llega a mediados de agosto.

Una julay encoñada se coge un empute que no veas cuando la acusan de lagarterana y no deja títere en pie

Una tipa que trabaja supuestamente para la CIA como agente secreto es acusada por un chamo ruso que pasaba por allí de agente secreto ruso que quiere matar al presidente de ese país en una visita a los Estados Unidos. Después de rebotarse toda y escapar se dedica a matar ciudadanos americanos y a hacer eso que según ella no iba a hacer mientras un atajo de panolis la persigue por Washington y Nueva York.

Un poquito de por favor. La película comienza con Angelina Jolie siendo vapuleada en Corea del Norte y te juro que lo primero que pensé fue que la hijaputa fue allí a comprar más niños, que otras prefieren zapatos pero a esta lo que le mola es la carne pagada al kilo y procedente de países asiáticos. De allí saltan a América y de repente ella es una espia doble y mata gente a destajo y pone las mismas caras que en Tomb Raider solo que aquí no hay ni templos ni monos y corre que no veas. Menuda mierda. Empecemos por lo obvio. El guión es de pena. Yo gritaba a todo el que me quería oír quienes eran los agentes dobles desde media hora antes de que se descubran. Es tan obvio que da hasta vergüenza. Aún más patético es poner a esta mujer saltando de camión en camión a toda velocidad sin que se le parta una puta uña y sin que se le corra el maquillaje. La selección de escenas de eso que llaman guión es tan absurda y estúpida que me hace pensar que a los guionistas se la metieron doblada y se pensaron que compraron jaco del bueno y en realidad les vendieron sal de fruta de toda la vida. Hace falta tener un cerebro con graves deficiencias de oxígeno y daños permanentes para creerse esta bazofia de historia. Por si no es poco, la protagonista parece perdida entre tanta acción y aburre hasta el infinito, poniendo la misma cara una y otra vez e intentando hacerse pasar por rusa sin que cuele en ningún momento. Además, alguien le tendría que decir que ya está vieja para esos papeles, que lo de chama que acaba de salir del instituto ya le pilla con muchas afeitadas de coño y no cuela ni con exceso de maquillaje. Y con un guión que peta y una protagonista que da risa, lo único que falta para culminar este desaguisado es un cámara al que su ayudante se la mete hasta los güevos cuando están rodando y la cámara venga a menearse pa’ arriba y pa’ abajo sin parar haciendo que todos los espectadores traten de encontrar las bolsas para vomitar que deberían poner en los cines en estos casos. Además de agitar la cámara el director tenía un ramalazo de artisteo y sugirió una profundidad muy reducida de campo y en la mitad de las escenas hay un pequeño trozo enfocado y el resto difuminado y como el ayudante se la está empetando al cámara por detrás, el foco cambia continuamente del sofá a la penca a la ventana a la puerta al suelo a la lámpara al chucho a la penca al sofá y así no hay quien se entere de que va la cosa y si encima cortan los planos cada tres décimas de segundo pues peor.

La trama principal es más vieja que Sara Montiel con la coña de la guerra fría entre americanos y rusos y no es creíble, al igual que todo lo dicho anteriormente. En este tremendo desaguisado da risa que una tipa sola mate a la mitad de los agentes secretos y no secretos de los Estados Unidos, que entre en la Casa Blanca y ella sola mate a decenas de tíos que parecen retardados y que no recibieron entrenamiento alguno y consiguieron el empleo como en los ayuntamientos españoles, con enchufe de algún primo.

Una película de puta pena que atraerá orcos por miles y que no se merece ni el pagar por el alquiler para verla en casa.

02/10


2 respuestas a “Salt”

  1. Seré raro, pero me cuesta horrores tragar a la mujer ésta en cualquier película y viendo tus comentarios, mucho más.