Sully


La película de hoy la fui a ver hace prácticamente dos meses y ha estado macerándose en mi despensa hasta hoy. En aquellos tiempos en que la fui a ver, yo hasta era un demócrata que voto a cierto partido holandés y tenía claro que Clint Eastwood, el director de la película, es un maestro en el arte del cine y al mismo tiempo, más bien facha. Después la semana pasada llegaron los podemitas, esa miasma asquerosa y repelente capitaneados por una folclórica estropeadísima con el pelo más asqueroso del hemisferio norte, y determinaron que cuando alguien vota a un partido que no es el sucho, es facha y así, con esa elegancia ejecutiva, Clint Eastwood y un servidor acabamos en el mismo lado del espectro político pese a no compartir ni una idea. Hoy celebramos a este fabuloso director y a su última película, Sully, que por fin llega a la cartelera española la semana que viene.

Un julay que pilota las pasa putas para no matar a la basca cuando le asignan un avión de Buelin

Un piloto ameriza sobre el río Hudson en Nueva York al poco de despegar y salva a todos los pasajeros de una muerte que a ratos es segura y en otros no lo es. El chamo se convierte en un héroe hasta que aparecen los podemitas y tratan de convertirlo en casta, porque para ellos la única libertad es la suya.

Lo primero que hay que decir es que en la película vemos un montón de escenarios que tratan de probar que al final, el piloto tuvo un golpe milagroso de inspiración y salvó a los pasajeros porque tomó la decisión correcta en el momento oportuno. Vemos tanto las pesadillas del piloto en las que toma otras decisiones y estampa el avión como las simulaciones que hicieron los expertos. La película nos lleva por el calvario de un chamo que hizo bien su trabajo, salvó a todo el pasaje y aún así, es casi convertido en un demonio hasta que se probó que lo hizo bien. Está interpretado por Tom Hanks que en esta película está fantástico y vuelve a recordarnos por qué es uno de los grandes. Su piloto lo tiene todo, es sencillamente perfecto. A su lado, en ocasiones, tenemos a Aaron Eckhart que era el copiloto en el avión y que también vivió de primera mano lo que sucedió allí. Sus momentos juntos sirven de contrapunto a la historia, nos muestran a las personas que están detrás de las heroicidades y que al final del día, se van a tomar una cerveza o salen a correr al parque que está junto al hotel. La forma en la que se cuentala historia es impecable, la película no la estiran hasta el infinito y dura poco más de hora y media, lo justo y necesario para explicar los hechos, los actores están fantásticos y sales del cine pleno de confianza en algunos miembros de la especie, particularmente aquellos que no son truscolanes.

Aunque se sale un poco de su zona de confort, creo que puede gustar a los miembros del Clan de los Orcos y definitivamente es de obligado visionado para los sub-intelectuales con GafaPasta.


3 respuestas a “Sully”

  1. ¡Genial!
    Además, estoy de acuerdo que la estupidez de los podemitas supera a la de los truscolanes a los que están dispuestos a darles lo que pidan con tal de que les den sus votos para tomar el poder y traer Venezuela a España cuando gobiernen, ellos, los de POdemos y no el pobre desvencijado PSOE con su abstención obligada para no darse la hostia padre en unas nuevas elecciones, han vuelto a poner una alfombra roja al deleznable Rajoy para su permanencia en la Moncloa, y esta vez, con mando en plaza, y a jodernos de nuevo con ese tío en el poder, pero mas vale malo conocido que mas malo aún por conocer…
    Salud

  2. Hay un montón de lerdos que aún no entienden que votar Podemos es votar por Venezuela HOY en día, sin productos, con crímenes a todas horas por todos lados y con una banda de rufianes amasando millones y llevándoselos a otro país. El garrote vil ya debería estar en marcha y el pelucas tendría que haber sido el primero en pasar por esa digna máquina.

  3. No se…
    Tengo mis dudas…
    No me decido por el garrote vil o la guillotina, claro que el despelleje con aplicación de vinagre tampoco seria mala cosa… 🙁
    En fin, seguiré pensando, seria una gozada… 🙂
    Salud