El problema de ir al cine varias veces a la semana es que no llegan a la cartelera suficientes películas y al final has de ver cosas que ya con el trailer te han puesto los pelos de punta y te han asustado. Al final, si cuadra en mi planificación y si ese día llueve, o hace frío o cierto amigo se empeña porque parece que tiene acción y hay tiros y coches rápidos y todas esas cosas que lo deslumbran, acabas yendo al cine a pesar de que cuando vistes el trailer se te puso un mal cuerpo de cojones. Este fue el escenario al que nos enfrentamos cuando fui a ver The Devil’s Double, película que no tiene fecha de estreno en España y que es probable que nunca llegue a la cartelera.

Un julay consigue un trabajo de putero y cabroncete por parecerse a un malaje de cuidado que chinga a toda pelleja que se le antoja

En tiempos de Sadam Irak era un coto en el que sus hijos hacían lo que querían y particularmente el desgraciado de Uday, un psicópata criminal y de natural hijoputa que abusaba del infinito poder que tenía en sus manos para violar, torturar y matar a antojo. Como tenía miedo de ser asesinado, se busca un doble, un tipo al que le roban la vida y al que amenazan con matar a su familia si se niega. Después de unas cuantas operaciones estéticas, este hombre lo suplantará en muchos actos públicos y descubrirá con horror que su vida pende de los antojos de un chiflado.

Esta es una de esas películas que empiezan muy bien pero que después de un rato cae en el tedio y la repetición y se te hace interminable. Todos parecen repetir las mismas frases una y otra vez, la crueldad y el sadismo se repite y se repite y se repite y pierde la frescura de la primera vez y la historia no parece ir a ningún sitio. Tenemos al psicópata y al pobre desgraciado, ambos interpretados por el mismo actor, que cambia de un registro al otro y sí, tiene su mérito y tal y tal, pero coño, cúrrense un poco más el guión. Lo mejor y lo más significativo de la película es la interpretación de Dominic Cooper pero por lo demás, mi interés fue languideciendo, las miradas al reloj fueron aumentando y cuando se puso la pantalla en negro salí escopeteado de la sala porque estaba hasta dando cabezadas. Interesante por lo que cuentan, algo que desconocía pero fallida por como lo cuentan.

No te has de preocupar porque no creo que llegue a los cines y de hacerlo será en filmotecas o en cines en los que el Clan de los Orcos no entra ni por asomo.