Todo fue por un escritorio


No seas truscolán y empieza a leer esto por donde se debe, que no es otro lugar que La buhardilla

Todo, todo, todo lo hecho en la buhardilla de mi casa se hizo para llegar al día de hoy, a ese en el que por fin tengo un cutre-rincón de trabajo, para el día que trabaje. Ni siquiera este último paso, en esta procesión interminable, fue fácil. En los meses que han pasado he cambiado de opinión una y otra vez, a veces quería una mesa con forma de eLe, a veces no, que se pueda subir y bajar para alternar entre estar sentado y de pie, también con los tamaños, a veces de un metro veinte, otras de un metro y sesenta, otras de sesenta centímetros de ancho, a veces setenta, quizás ochenta y finalmente, cuando llegó el momento, elegí una mesa convertible para trabajar sentado y de pie, la elegí de un metro cuarenta de largo y ochenta centímetros de fondo y elegí la silla probando que sea cómoda. Suena fácil pero ayer fui a la tienda esa sueca, que fue al final en donde decidí comprar, me llevé a mi vecina que tiene carro y no se lo han robao, cogimos las tres cajas más una especie de protección para el suelo de las ruedas de la silla, lo llevamos todo como buenamente pudimos a mi keli, que no fue fácil porque el tablero era gigantesco y después me puse a crearlo todo, que con esos libros de dibujos que hacen, es una pesadilla. Cuando ya está la mesa enterita y perfecta, la enchufo, le doy al botón para subir y no sube, le doy a bajar y no baja. Me cagué en todos los muertos de los suecos. Justo esa parte del escritorio es una cajita que se ve pequeña pero pesa veinte kilos, que es como un tercio de mi peso. La tuve que desmontar, volver a empaquetar y esta mañana regresar a la tienda a devolverla, porque si lo que quieres es que te la cambien tardan dos días, pero si la devuelves te pagan inmediatamente y puedes entrar y volver a comprar otra, uno de esos misterios de las finanzas que son imposibles de explicar. Así que me dieron mi vale regalo, entré, cogí otra caja con las patas y sus motores, la pagué, regresé a mi casa y en este segundo intento, lo primerísimo que hice fue conectar todas las partes eléctricas, enchufarlas y asegurarme que funcionaban, como así fue. Después de eso ya monté la mesa, que era la primera parte. Con el escritorio en su sitio, llegó la hora para que el ordenador abandonara su habitáculo en la planta baja y subiera a la planta noble y así llegamos al punto en el que el proyecto se considera acabado, hasta aquí queríamos llegar y hemos llegado. La regadera, por supuesto, no se resistió a subir a noveleriar y para salir en la foto. Detrás de ella, el ordenador y el micrófono de YO NUNCA. La torre de CeDés que se ve al fondo ha bajado a la otra planta y estoy por tirarla. El color de la mesa, para aquellos que tienen ojos en perfectas condiciones, es gris, pero hay uno que solo puede ver blanco o negro, así que imagino que la ve blanca, como las paredes o las cortinas.

Esta mismita semana estrenaré el lugar en una entrevista telemamática de trabajo. Todavía estoy decidiendo si la haré sentado o de pie, que es como más facinersoso.


14 respuestas a “Todo fue por un escritorio”

  1. Yo creo que has acertado plenamente con la mesa, tanto en diseño como en tamaño, mas pequeña no te hubiera quedado bien por lo que veo.
    Por cierto, no se te olvide avisar cuando recomiences el «Yo nunca» porque ya he perdido la rutina y no me voy a enterar…
    Salud

  2. Lo primero, baja la CPU al suelo, te sobra sitio en él y nunca sobra en la mesa, aparte de que queda fatal. Lo de la torre de los CD´s… ya para gustos, yo es que aprovecharía ese hueco que te queda en la bajante del techo para poner estanterías en escalera donde poder poner las cosas del escritorio, a mí me da mucho juego la que tengo al lado de la mesa. Las kallax de los suecos se pueden poner en diferentes composiciones y tienen accesorios como puertas, cestas y cajones variados, o si las quieres más estrechas, las billy.
    Ah! y te falta un buen flexo! Si lo pillas negro te va a juego con el micro y el equipo…

  3. Totalmente de acuerdo con Virtu, la CPU arriba queda fatal.
    Yo la tengo debajo de la mesa, pero colgada para que no moleste en el suelo.
    La buhardilla te ha quedado muy bien y con mucha luz para trabajar, pero en mi opinión, aunque ya sé de antemano que te importa un carajo, está decorada de forma muy masculina, vamos, sin decoración alguna.

  4. Lo bueno del pedazo de monitor de 32″ es que yo no veo la torre y ahí se queda por ahora, lo de colgarla no me acaba de convencer.

    montse, si por decorada quieres decir que no hay nada en las paredes, efectivamente. He sopesado poner un vinilo en la pared de detrás pero nunca me acabo de decidir entre «truscoluña no es nación» y «CHU-pamela». En la punta de arriba de la escalera también he mirado para poner algo modesto y sencillo como «A novelerear a tu puta casa» o algo así, quizás un poco más enfático como «A novelerear al coño de tu puta madre».

  5. Por cierto, siguiendo con las ideas de Montse, ahí en la bajante del techo, colgar un cartel de alguna de tus pelis favoritas con mucho color le daría un toque es-pec-ta-cu-lar.

  6. no creo en posters, cuadros, fotos o cualquier cosa adosada a las paredes. Todo eso modifica tu karma y lo estropea y además, acumula polvo

  7. Pues mira que no tendrás tú fotos chulas que te alegren el karma… eres un soso y punto!

  8. Nene la buhardilla ha quedado E-S-P-E-C-T-A-C-U-L-A-R, sobretodo porque has hecho exactamente lo que te comenté nada más ponerte con ella, toda blanca y suelo de parquet. Otra cosa es el chiringuito de YUTUVER que te has montado. Como dicen las damas esta torre al suelo, la mesa ha de quedar mínimal con sólo la pantalla, el teclado, el ratón y el flexo del micro. Recoge los cables que no se vean y …. ¿Ese plástico debajo la silla? ¿En serio? ¿Con la chulada de parquet que has puesto le vas a poner ese plástico? A la silla le puedes montar ruedas para parquet, ese plástico es un acumulador de mierda y además cuando lo retires se verá el parche porque el resto del parquet habrá clareado y ese no y entonces te acordarás de cuando doverinto ya te lo advirtió. Y esa silla negra y … ROSA? No me digas más que ya intuyo de que va tu canal de YUTUVE

  9. La inteligencia no parece estar muy bien repartida por aquí y la torre en el suelo, en una mesa que se levanta un montón, es imposible porque tendría que tener unos cables gigantescos. Lo de colgar la torre bajo la mesa me parece barriobajero y como está detrás del monitor, yo no la veo.
    Sugiero preguntar a la cajera del supermercado la diferencia entre laminado y parquet porque son muchas y muy claras. Si conocieses cierta marca sueca sabrías que sus ruedas son incompatibles con las otras y en este modelo de silla, no hay blandas. Cada dos semanas, cuando venga la mucama, quitaré el plástico y el suelo se limpiará entero y después lo volveré a poner. Me toma en total treinta segundos o menos.
    Veo que sigues sin ver colores. Y en italiano, rojo se escribe con dos eSes, es rosSa. La única razón para comprar esta silla y no la que quería fue que la susodicha lleva agotada casi tres meses y retrasan continuamente su llegada a las tiendas y paso de pegarme esperando hasta el fin de los tiempos.

  10. Ya sé que silla es esa agotada! yo también le ando detrás, no hay manera de que la repongan! XDDD

  11. La que compré es casi idéntica solo que tiene la barra roja por detrás que a mí no me molesta y lo de la cabeza. También la tienen en blanco con la barra trasera en azul