En el vrijmarkt ves de todo. Hay gente que aprovecha para deshacerse de viejos muebles que ya no quiere, de ropa que no usa, de libros que ha leído o de cualquier otra morralla. Algunos intentan apelar a la lástima u otros obscuros instintos y ponen cartelitos diciendo que donarán el dinero a una ONG o lo usarán para pagarse un viaje por alguna tierra lejana durante unos meses (algo que los jóvenes holandeses suelen hacer) y mientras tanto, muchos aprovechan para comprar gangas. Entre las cosas que más raras me parecen es el comprar zapatos usados.
En la foto, junto al Oudegracht en la ciudad de Utrecht podemos ver a una que se trajo todo metido en una maleta, montó su chiringuito en la calle y estaba allí vendiendo sus cosillas, incluyendo alguna ropa que yo no me pondría jamás si no es nueva. En estos mercados siempre se puede negociar el precio.
9 respuestas a “Vrijmarkt Utrecht – Mercado libre de Utrecht”
Yo he regalado a caritas 17 bolsas de ropa casi nueva recientemente si hubiese sacado 50 centimos por pieza me habria ganado mi buen dinero. Al final no es mala idea, en Holanda existe algo que no he visto yo en ninguna otra parte, un mercadillo real que se monta dos veces al año y donde los padres pueden intercambiar ropa de niños, si tienes ropa en buen estado de todas las edades vas alli y ellos le ponen un precio lo revenden y tu con lo que ganes puedes comprar ropa para tus hijos de otra gente. Los holandeses para eso son mas inteligentes y menos escrupulosos, que conste que no reciben nada que no este en buen estado. Te ahorras una pasta. Y la ropa que compras es tan nueva que ni te lo crees, tambien hacen lo mismo con los padres. Yo tengo amigas que me cuentan que alli llega gente a comprar en coches descapotables, osea que no es cuestion de dinero sino de intentar que la ropa que no le sirva a tus hijos la pueden usar otros y viceversa.
Besitos.
En Hilversum hay varias tiendas de ropa usada y son super-mega-populares entre todo el mundo. Lo mismo con los muebles.
Y hay varias tiendas específicas con ropa de niño. Cerca de mi casa cuando vivía aquí alucinaba con una que alquilaba los trajes de primera comunión y todas las semanas en la época de esta nefasta costumbre los usaban niños distintos.
Yo suelo regalar los muebles al Kringloop y ellos los venden en su tienda de objetos usados. También suelo poner la ropa en los contenedores que hay junto a los supermercados.
Mi amigo el Moreno vendió todo lo del bebé una vez que ha ido creciendo y muchas cosas eran compradas de segunda mano y el Rubio le compró uno de los dormitorios a una pareja que tenía un hijo que ya era demasiado mayor para el mismo y el mismo año pasado el Rubio compró una caseta enorme para poner en el jardín, con una tirolina, tobogán y mil cosas más que nueva vale un güevo y parte del otro y se la dejaron por doscientos eurolos. Los chiquillos parecen monos, todo el día usándola. Cuando se cansen, la venderá y seguro que recupera parte o todo el dinero.
A mi me parece una idea genial lo que hacen, tanto compradores como vendedores.
Y también me gusta lo que hace Sulaco, yo hago lo mismo, pero seguro que cuando un rumano o un moro abren la bolsa de mi ropa, le escupen y no por sucia, que va limpita, por vieja, que ya sabéis que uno es V.I.P pero pobre, y la ropa hay que estirarla que es muy cara…jajaja
Salud
Genín, qué cosas tienes, hijo. Por lo demás, lo de la ropa de niño me parece muy buena idea, aunque lo de ponerte zapatos usados por otro, no lo haría ni muerta. Qué asco, por Dios.
Zapatos no venden en esos lugares de bebes y adultos que yo sepa. La higiene es fundamental y comprar zapatos usados es como comprar bragas usadas.
:S
Yo vi gente vendiendo bragas usadas en el Vrijmarkt. Tenía que haberles hecho una foto. Y Waiting, seguro que Hannibal Lecter si están sin lavar se las compra para echarse unas caladitas, que huele rico, rico.
Ay Dios mio!
Bragas usadas, yo lei que a los japoneses les gusta comprarlas por internet, DIOS MIO! Que horror! Una cosa es eso y otra que las compren en un mercadillo, que feo, hay de todo.
🙁
En Tokyo dicen que hay 25 máquinas expendedores de bragas usadas por adolescentes y te garantizan que las han usado al menos 24 horas seguidas. Si algún día voy a ese país, busco una para hacerme una foto con ella.
Qué fuerte lo de las bragas. Hay gente pa tó, como decía el torero.