Algunos tiempos pasados no son mejores


Cuando alguien te dice que cualquier tiempo pasado fue mejor debes abandonar inmediatamente esa relación y sea tu mejor amigo, tu madre, tu esposa, tu hermano, tu marido o lo que sea, sal corriendo y no te acerques jamás a ese mal bicho porque está contaminado. Está bien el conocer el pasado para no repetirlo y es bonito el poder decir algo ubicándolo en la correcta línea temporal para demostrar que tu limitado dominio del idioma va más allá de poner caritas hechas con los dos puntos y el paréntesis en los mensajes de texto, pero chico, tampoco hay que pasarse.

Si no te dicen lo de cualquier tiempo pasado fue mejor pero descubres que hablan de eso que sucedió ayer en términos relativos al pasado y te dicen que había sido mejor que lo otro, entonces acabas de descubrir a uno de los cuatro hijoputas que quedan en el mundo que todavía usa el pretérito pluscuamperfecto, algo que quizás te suene vagamente familiar ya que en algún momento antes de llegar a los fantásticos años de las pajas y el sexo reflexivo seguro que te enseñaron en la escuela como bagaje vital para nuestra existencia y que olvidaste tan pronto como pasaste de curso. El pretérito pluscuamperfecto indica una acción pasada ocurrida con anterioridad a otra acción también pasada. Es decir, los incultos como yo preferimos expresarnos con frases simples y decimos algo tan lógico como me cagué por las patas pa’bajo después de comerme la garbanzada pero si eres un petulante soplagaitas dirías que había comido la garbanzada cuando me cagué por las patas pa’bajo. Parece lo mismo pero no es igual. La primera frase es lo que se oye en la calle, el populacho habla así, se expresa libremente y de forma sencilla usando un pasado sencillo que todos podemos comprender. En la segunda frase el cabrón que te la empeta es un terrorista lingüístico que te obliga a revisar la sintaxis y a percibir el hecho del acto de comer como anterior al de cagar de una forma sutil y ladina.

Esta semana pasada este maldito tiempo pasado que definitivamente es peor volvió a mi vida de manos del curso de holandés, idioma en el que es igual de inútil que en español. Uno no va largando pluscuamperfectos a aquellos a los que quiere, no piensa frases asignándoles tiempos verbales tan jodidamente específicos que deberían haber desaparecido hace mucho tiempo de todas las lenguas cristianas y quien tenga alguna duda al respecto es porque es una mala persona. En holandés se forma el pluscuamperfecto igual que en español, agarrando el verbo auxiliar haber y forzándolo a emigrar hacia el imperfecto pasado acompañado del participio del verbo que hemos decidido castigar y por supuesto hay que relacionar la oración con otra que ya está en el pasado dejando bien claro que la cochambrosa frase en pluscuamperfecto es anterior a la otra. Como todo ha de tener su excepción, los verbos modales holandeses se montan una orgía de desatinos y forman su pluscuamperfecto con el infinitivo del verbo modal y de aquel que realizaba la acción acompañados del imperfecto pasado del verbo haber y lo que nos queda es una frase con tres verbos que asusta al más pintado y que resulta imposible de entender para cualquier mal cristiano que como yo solo quiera cobrar la nómina y trabajar lo menos posible y ni te cuento si hay un verbo reflexivo de por medio y queremos conseguir asiento V.I.P. en el infierno usando alguna partícula temporal de esas que tanto abundan en holandés.

La última persona que usó el pluscuamperfecto conmigo en español murió hace mucho tiempo y ha sido toda una sorpresa comprobar que algo tan inútil y en desuso en mi idioma es un cáncer que también padecen los holandeses en el suyo. He realizado una encuesta nada profesional entre compañeros de trabajo y amigos y ninguno me supo decir cómo formar el puto pluscuamperfecto y una vez se lo expliqué reconocieron no usarlo en su vida.

Por desgracia lo tendré que usar esta semana en el examen final del nivel 3 y después lo podré volver a olvidar. Son las cosas de la vida, ya sabes, estamos obligados a repetir los errores del pasado y en esta piedra he vuelto a tropezar.

,

2 respuestas a “Algunos tiempos pasados no son mejores”

  1. No había acabado de leer tu post cuando ya pensaba que algún factor externo que motivaba tu opinión. El pretérito pluscuamperfecto enriquece nuestro lenguaje. Además nos diferencia de aquellos que aprenden el «castellano en mil palabras» con el método del profesor Maurer… y de aquellos que el único castellano que saben es «completo… 30 euros».

    Estudia y ánimo con el holandés!!!

    🙂