Hoy sí que tenemos una serie con una trama original, ya que desde el inicio de los tiempos y hasta el otro día, todas estas movidas supernaturales tienden a ningunear a las hembras o quizás debería decir a las hembres para no ofender a las marimachos si usamos la variación del idioma español podemita rastrero y marrullero. Hoy vamos a comentar la serie Bitten, que aunque tiene unos años desde que acabó, al parecer a España llegó el año pasado a través de alguna de esas nuevas plataformas televisivas con el mismo título.

Una pava tiene una vidorra de lo más normal, es fotógrafa, follable, tiene macho que se la empeta hasta los pelos de los güevos y parece ser feliz. La llama un pavo y fue hablar con él un rato y desquiciarse toda pa’l coño y vuelve a la keli de su familia o así y resulta que en realidad ella es la única, repito, la única, mujer lobo en un mundillo lleno de machos y pertenece a un clan de hombres(más hembra) lobo con mucha tradición, reglas y todo lo demás. Encima, en el clan hay uno de los lobillos que le pone los pezones como piedras de diamante y al que no le quiere dar un revolcón, le quiere dar dos docenas y media. A partir de ahí, resulta que en las barriadas periféricas donde viven los clanes de lobos hay unas movidas que no veas. Desde el principio, esta serie jugó con los calentones sexuales entre la loba que no está herida y el lobo que sí que lo está, que está perdidamente enamorado de ella pero la dejó marchar. Es que se pasan todo el día corriendo por los bosques y cuando están por allí, a aquel le falta tiempo para ir a montarla. Durante las tres temporadas que duró tuvieron unas movidas de qué te cagas con otros clanes y siempre se querían matar unos a otros y como ellos eran el único clan con una loba, todo el mundo les tenía una envidia que no veas y como encima la loba es guapísima y no una de esas furcias podemitas y truscolanas que te dan arcadas cuando las miras de lejos de lo orcas que son, pues más razones para seguir la serie. Al parecer está basada en una serie de libros que no he escuchado o leído porque lo de los hombres lobos no es algo que me motive, aunque quién sabe, quizás dentro de unos cienes de años me de por leer esos.

Esto es una serie que podría gustar a los miembros del Clan de los Orcos en la que la protagonista y el macho cabrío siempre están buscando la excusa para quitarse algo de ropa.