Bros


En mi desesperación por conseguir tres pelis nuevas que comentar, ya es que hasta me planteo ir a ver las que hay en cartelera para niños menores de dos años, que es que no hay absolutamente nada nuevo o que valga la pena. El otro día, hicieron una especie de pre-estreno para la película que voy a comentar y me planté allí, aunque por el trailer ya me daba un mal yu-yu del copón y bueno, esa sesión especial estaba patrocinada por un antro de julandros y a la entrada habían puesto copas de plástico de las malas con vino que no se lo pongo yo ni a mi comida y al parecer a la salida podías ir al antro mencionado y te daban una copa gratis de bebida de garrafón y un chupito de aceite de colza, pero puedo confirmar y reconfirmo que no fui y no opino sobre el antro porque salí del cine y me piré a mi casa con tremendo disgusto. La película se titula Bros y en España se estrena con el mismísimo título a fin de mes, que no les cabía en el poster el título más apropiado de truscoluña no es nación.

Un julay julandrón se encoña (o encula) de otro julandrón y le busca el ángulo para que se la empete, con mucho chimpún.

No tengo muy claro de que iba esto pero tenemos a un julandrón que es influenser o algo así y que no quiere tener una relación a largo plazo y busca rollos de chupar, encular y olvidar. Conoce y se encoña de otro julandrón que es más bien un adonis, que el primero es más feo que Tizio recién salido de la cama y el segundo tampoco quiere relación, pero es que acaban pasando todo el día juntos y culiando que no veas, que los ortos en esta película acababan más que rotos. Al parecer todo el mundo menos ellos ve que son la pareja de julandros ideal y como siempre, tendrán que romper, echarse de menos y arrejuntarse de nuevo para tener su final feliz, en este caso, con más culeo.

Cuando decimos comedia romántica, la primera palabra implica que te echas unas risotadas, pero es que este refrito de todas las comedias románticas de la historia pero cambiadas para poner a dos chamos, se olvidó de la parte cómica y hay poquísimos, o incluso menos, momentos en los que te ríes. La parte romántica también les falla porque los dos se pasan el día repitiendo que no quieren una relación y están juntos. El director intentó educarnos o más bien aterrorizarnos, con la miriada de LGBTQ+TU-PUTA-MADRE y bueno, allí no hay ni hombres ni mujeres, cuando alguien le pregunta a uno TÚ-QUE-COÑO-ERES, las respuestas son terroríficas, que uno de los dos pavos dijo que era un Macho CIS julandrón y tuve que buscar en las Internetes lo de CIS porque yo vivo en una ignorancia maravillosa y por si hay algún inculto aquí, al parecer CIS es si eres normal y te identificas con el sexo que te ha tocado, es decir, si eres portadora de chocho (peludo o pelón) y te identificas como hembra, eres CIS hembra y si eres portador de güevos (peludos o pelones) y te identificas como macho, eres CIS macho, o algo así, que la estupidez es infinita y en los grupos esos LGBTQ+TU-PUTA-MADRE se puede ver fácilmente que están formado por gente que está pidiendo a gritos la paga de subnormal. El que hizo el guion realmente debería haber pasado algún tiempo pensando en la historia y no comiendo miembros, el director, si se saca el florero que se metió por el orto y se dedica a dirigir, igual habría conseguido algo con cierta calidad y bueno, los actores, supongo que se limitaron a hacer lo que les salía de la pipa del orto y así llegamos a donde llegamos. Esta es una película hecha para un grupo reducidísimo de espectadores, si no estás en ese mundillo y si no te interesa, no te enterarás del noventa por ciento de lo que ocurre.

Si eres un miembro del Clan de los Orcos y bueno, tú E-N-T-I-E-N-D-E-S, seguro que te flipa pero si no, huye y sigue huyendo y no mires atrás ni te quites la mano con la que te tapas el poto. Si eres un sub-intelectual con GafaPasta, con esta sí que te quitan las gafas y te las rompen. Marginal, mediocre, aburrida y solo para los otros.


3 respuestas a “Bros”

  1. El único CIS que me sonaba hasta ahora era N-CIS, la serie esa de Gibbs (que ahora ya no está)… madre mía, al final ya no sé que leches soy…