Expediente Warren: El caso Enfield – The Conjuring 2


Hace algo más de dos años y medio iba a ver Expediente Warren – The Conjuring y flipaba en los colores y en el blanco y negro y hasta en estereo con una película de terror que me dejó noqueado. Recuerdo que me cagué por la patas pa’bajo, aunque como eso es algo que jamás reconoceré, decir que tenía un lamparón por culpa de un peíto con substancia que rezumaba mierda por todos lados. Cuando vi por primera vez el trailer de la segunda parte, casi lloro de la rabia porque estas cosas las cagan desde que huelen el dinero. Aún así, reservé mi entrada para ir a verla el primer día por la noche en un cine que estaba prácticamente petado. Se trata de The Conjuring 2 y en España han tenido que apechugar con la mierda de título que le pusieron a la primera y ahora tenemos la aberración de Expediente Warren: El caso Enfield que mezcla cipotes con potorros y que parece haber salido de la mente de un subnormal y se estrena la semana que viene.

Unos julays investigan una reposesión truscolana en la keli de una chichona que no es la chocha del martes

Obviamente, todos conocemos el El caso poltergeist de Enfield porque se han hecho un montón de documentales sobre el mismo e incluso una mini-serie que me ponía los cataplines bajo las amigdalas. Para aquellos seres inferiores que no lo sepan, este sucedió en el Reino desUnido, en la ciudad de Londres, en la keli de una chama empobrecida en la que comienzan a suceder cosas terroríficas que no se sabe muy bien si son culpa del más pa’llá o del deshonorable presidente de truscoluña, el país que no existe. En la película, esos hechos se alteran un poco y los investigadores que tanto caguelo pasaron resolviendo el de Warren, van dudando a Londres porque la chama tiene un mal pálpito para investigar. En la casa, todo está fuera de control con muebles que vuelan, una niña que parece ultra-hiper-mega-super activa y que igual se te queda en el aire quieta que pone una voz de machorra que no veas que hace cosas raras. Está claro que en la casa hay un fantasma muy chungo que le quiere hacer pupìta a todos y los investigadores no saben por donde salir. Entre sustos, iremos viendo como avanza la cosa y nos prepararemos para un final que parece abocado a lo peor de lo peor.

Hacer una segunda parte y que sea un peliculón, eso no lo consigue todo el mundo. Hacerlo en el género de terror, eso era IM posible hasta esta película. Menuda pasada. La historia es perfecta, está narrada con un ritmo impecable y te acojona tanto que pese a ser cientos en la sala, no se oían ni los peítos que suele echarse la gente. Eso sí, cuando se veía que iba a pasar algo, todos nos preparábamos, yo me colocaba en posición de impacto de avión y al suceder, gritábamos al unísono. Creo que he batido mi récord mundial de gritos en una película. Me cagué varias veces de miedo y mira que lo veías venir, pero es que está tan bien hecho que ni así. Junto con la anterior peli, esta forma el dúo de las dos mejores películas de terror del siglo veintiuno (XXI equis-equis-palito). La jovencita Madison Wolfe puede estar contenta porque ha conseguido lo imposible, hacer que todo un cine esté aterrorizado. Esto es un clásico pero ya mismo.

Cualquier miembro del Clan de los Orcos al que le gusten las pelis de terror tiene que ir a ver este clásico instantáneo y si lo hace con su hembra, mucho mejor, porque se le va a pegar como ladilla a güevo y de gratis tendrá frotamientos. Los menos ñangas de los sub-intelectuales de GafaPasta seguro que también se lo pasarán bien. Un pasote que no veas.


5 respuestas a “Expediente Warren: El caso Enfield – The Conjuring 2”

  1. Esta no la consigo todavia, pero en vista de lo que dices voy a ver la 1, la primera que si la he encontrado 🙂 gracias chaval 🙂
    Salud

  2. No jodas… no paran de echar el trailer por la tele, y ni de coña me hubiese imaginado esa nota, pues menos mal que no tienes escrúpulos en la elección de película, porque ahora gracias a tí, voy a darle una oportunidad.
    Aunque si es tan buena como dices, a ver quien quiere verla conmigo, que paso de ir sola, y la gente de mi casa no quiere saber nada de terrores.