Faithfully Yours


Tenemos otra peli neerlandesa, una que se estrenó cuando yo estaba de vacaciones navideñas en Gran Canaria y que creo que he reservado la entrada para ir a verla como cuatro veces y siempre cancelo porque el título ya me daba un mal llu-llu que no veas y como que la perspectiva de mamarme veinte minutos de bicicleta con lluvia continua para llegar al cine empapado y ver esto no me convencía en absoluto. Finalmente pillé un día sin lluvia y en el que no ponían la película a las once de la noche y así fue como fui a ver Faithfully Yours, que pese a ser neerlandesa, le pusieron el título en inglés, ya que en neerlandés el título debería haber sido Hoogachtend, que es una de las formas de terminar formalmente una carta, indicando más o menos que te pones de rodillas y le chupas el cipote con ilusión y mucha fantasía. En español, aunque por suerte la película nunca se estrenará, tienen para elegir entre truscoluña no es nación o la más aburrida traducción literal de fielmente tuyo.

Una julays pelanduscas chingan que no veas y le hacen Vitorinos a sus machos.

Tenemos a dos amigas, una de ellas jueza y borde que no veas, que de cuando en cuando se van a un poblacho en la costa de Bélgica a pasar el fin de semana, sin sus machos o niños. Supuestamente es amistad y todo eso pero en realidad, lo hacen para follar con otros y pegársela a sus machos. En esta última escapada, matan a una de ellas, o más bien desaparece y se cree que la han asesinado y se destapa todo el entramado de estas dos pelanduscas podemitas y truscolanas.

Esto es supuestamente una peli de suspense y drama, pero es que no, que ni los noventa y cinco minutos que dura lo justifican, es que la historia daba como mucho para veintidós, o lo que viene a ser un episodio de televisión de serie de media hora, con ocho minutos de publicidad. Se curraron a conciencia que nos caigan mal las dos hembras, que no hay por donde cogerlas, están engañando a los maridos y una de ellas miente como una bellaca y es jueza, que en su juzgado, en una escena inicial, la vemos recriminando a alguien a quien le va a meter una condena de que te cagas por eso mismo y después ella mira a los ojos al marido y le miente que no veas, o incluso a la policía belga, aunque más tarde descubre que el marido ha puesto cámaras en la keli que tienen en Bélgica y en realidad, el chamo tiene una colección increíble de vídeos de su mujer follando con otros machos, mayormente jovencitos, que le gustaban con menos edad que ella y a ser posible, negros por aquello del tamaño de lo que les cuelga por debajo. El guion hace agua en muchos momentos, es aburrido y repiten el mismo tipo de escena una y otra vez con toda la sala sabiendo que se están guardando un as en la manga para sorprendernos al final, algo que no lograron. A mí me aburrió.

Si eres un miembro del Clan de los Orcos, este tipo de cine pretencioso te debería provocar una fuerte reacción alérgica y a los sub-intelectuales con GafaPasta tampoco interesará algo así.


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