De repente en noviembre hubo una racha de estrenos neerlandeses y este es el primero de al menos tres películas que voy a comentar. También, si alguno se fija atentamente en la línea superior del póster, es una peli que pese a no estrenarse fuera de los Países Bajos, estará disponible en una plataforma digital y tal y tal, con lo que cualquiera la puede ver, aunque supongo que será con subtítulos. Según me han dicho algunos, en los Países Bajos, en los noventa, hubo un movimiento que es el que refleja la peli, pero vamos, que cuando yo llegué ya había pasado. La peli se titula Hardcore Never Dies y en español se puede traducir como truscoluña no es nación.

Un julay acarajotao se lleva del pollardón de su hermano y acaba bien jodido.

Tenemos a un panoli que quiere ser pianista profesional y que tiene un hermano al que su padre echó de la keli y que es como punki o algo así. El chamo se junta con el hermano y este lo mete en el mundo del trapicheo de drogas, que es lo que hace el otro y en el mundo de la música más heavy que hay y en el que la gente se peta de pastillas y después saltan y como que están en trance, o eso que otros llamaríamos, drogados. El pavo va de mal en peor y al hermano los trapicheos con droga le salen mal y para salir del agujero en el que se han metido, tienen que suministrar drogas en un festival en Alemania pero vamos, que aquello no pinta muy bien, o algo así.

Aparte de la música horrenda, esto es más bien un drama familiar y de como esas relaciones te pueden joder la vida. El hermano pequeño adora al grande, que básicamente es un joputa y un macarra y el otro se la suda, solo le interesa cuando le puede sacar algo y como que el chaval tarda en darse cuenta y mira que su padre se lo dijo clarito. Nos metemos en el mundillo de los que trapichean con pastillas y la gente que las usa y resultó bastante interesante. La historia es muy entretenida y la relación entre los hermanos es fascinante, pero de alguna manera, cuando llegamos al final, como que se le fue el baifo al cielo al guionista y al director y cagaron la historia, no supieron como terminarla y todo lo anterior, que era muy bueno, se queda huérfano y te vas del cine pensando que podría haber terminado diez minutos antes y haber sido una película épica y no una simplemente buena.

Esto lo odiarán por igual los miembros del Clan de los Orcos y los sub-intelectuales con GafaPasta.