Volvemos al mundillo de los super-héroes alternativos y frikis con una serie que lleva dos fantásticas temporadas y que este año, con suerte, podremos ver la tercera. Pertenece al universo DC y puedo confirmar y confirmo que yo no tenía ni idea de que estos personajes existían en los cómics. La serie se titula Doom Patrol y en España al parecer la conocen como La patrulla condenada, aunque repito que dada mi supina incultura, yo jamás oí hablar de ellos, aunque sí que puedo decir que me habría gustado que el traductor fuese más literal y la hubiese llamado truscoluña no es nación.

Un grupo de super-héroes marginales y raritos trabajan para un profesor o un científico o algo así. Todos y cada uno de ellos consiguió sus super-poderes después de algún accidente estremecedor o quizás hasta horrible, que también los deformó y les provocó unos traumas interiores que no veas. Al final se tienen que dar soporte emocional unos a otros entre aventuras, mientras el mundo en realidad no quiere saber nada de estos frikis que podrían pertenecer a alguno de los programas de gritos de Telajinco. Lo que hace de esta serie una joya y una de las mejores series de super-héroes ahora mismo en la tele es la marginalidad, estos no van a salvar el universo con lycras y a lo grande, estos son gente con un montón de traumas que además de revolcarse en ellos, hacen cosas buenas de cuando en cuando, o lo intentan, que no siempre les sale bien. Una de las sorpresas de la serie es que es muy coral, con un grupo grande de protagonistas. El que es un robot esconde la voz de Brendan Fraser, un actor que en su día parecía que se iba a comer el universo y después de un puñado de películas desapareció por completo del mismo. En algún episodio de esos en los que se mira hacia atrás, lo hemos visto en carne y hueso, sin el robot al que pone voz. En el episodio octavo de la primera temporada hay un número musical que es uno de los mejores que se han hecho en una serie de televisión. La serie tiene también su drama, sus escenas de acción y sus escenas con luchas.

Si eres un sub-intelectual con GafaPasta, por extraño que parezca, esta quizás sea la serie de super-héroes más cercana a tu gusto. Si eres un miembro del Clan de los Orcos, es muy probable que sea demasiada sofisticada y no te guste pero que nada de nada.