Lo que va pa’llá vuelve pa’cá


Creo que nunca lo llegué a contar por aquí porque es algo a priori no interesante, pero hace cosa de un mes o mes y pico preparé una hoja de ruta de todo lo que podía suceder y sucederá en la Unión Europa y el reino desunido en los próximos años en lo relativo a políticas medioambientales y cosas así relacionadas con el laburo. En realidad hice dos documentos, uno serio y formal con cada una de las normativas europeas que están por cambiar o pueden cambiar o desaparecer, explicando un poco de que van y poniendo enlaces al lugar en el que se puede encontrar la información oficial. El otro documento lo hice pensando en ciertos habitantes del país del sol caguiente, con un sendero en forma de ese, con muchos colorines y con hitos cada seis meses para el 2023 y anuales para el 2024, 2025 y 2026, con la misma información, pero resumida y en formato manga. Ambos documentos eran para mi jefe, aunque le sugerí compartirlos con los amarillos para que cuando les digamos que algo drástico ha sucedido, que no se hagan los lolailos podemitas y truscolanes que no sabían ná de ná. Se lo mandé a tres de ellos, con los que suelo hablar y me lo agradecieron enormemente, deseándome, todo lo peor, siempre.

Cuando fui a la reunión que conté en Preparando el palo, también compartí el documento con ellos, sobre todo para darles una idea de como indicar visualmente lo que queremos decir, que para algunos seres inferiores, lo visual les entra más fácilmente y así no te corren a coger el cuchillo de la cocina y quitarse de en medio. Ayer conté lo que sucedió en esa reunión y los de la parte legal de la empresa tenían una reunión esta semana con los amarillos de la sede corporativa para venderles la idea de la maquinaria de gestión horizontal de eventos legislativos transcendentales y traumáticos por la gloria de Mafalda, que aún no le han puesto un buen nombre. Esa reunión era para conseguir el visto bueno porque nunca antes, fuera del país del sol caguiente, se habían juntado los diferentes pedazos que forman la multinacional para colaborar y trabajar juntos, ellos siempre han preferido que cada uno vaya por su lado y que algún Dios reparta suerte. Justo ayer, estaba en la oficina y una de las de la parte legal manda unos documentos que ha recibido de una empresa de esas que hacen informes sobre lo que está sucediendo en la Unión. En el correo estaban varios y le respondí comentando:

Si estamos y queremos compartir información, acepto tu envío y aumento la apuesta.

Añadí cuatro documentos que recibí por otras vías con informes de lo que se cocina en cuatro países de nuestra Europa, con un montón increíble de información. La pava lo flipó y cuando responde, me dice que lo van a guardar pero que ya mismo como oro que cagó el moro, entre paños de seda y ya de paso me dice lo siguiente:

No te lo vas a creer. Tuvimos la reunión con los amarillos del Sol Caguiente y cuando estábamos en la misma, como queriéndonos hacer un favor, se emocionaron hasta las lágrimas enseñándonos la hoja de ruta con la que nos guiamos en la multinacional y resultó que era la que tú hiciste, tú, the Chosen One, tu senderito de colores llegó hasta la sede corporativa y ahora ellos lo comparten con nosotros como si fuera una reliquia y cuando les comenté que tú estabas en el equipo y que il Scelto era el autor de tal sacro documento, se les cambaron las pezuñas de puro gusto, ja ja jaaaaaaaaaaaaaaaar.

Llamé a mi jefe a grito pelao, que vino pensando que a alguien le había dado un jamacullo y teníamos que deshacernos del cadáver o que se nos estaba intentando colar en el edificio el deshonorable que huyó como el cobarde que es en el portabultos de un carro y que ahora vivee en Bélgica con su zorra rumana. Le enseñé el correo de la pava y cuando lo vio se tuvo que quitar las gafas y limpiar los cristales para volver a leerlo y aun así no se podía creer lo que decía. De Uitverkorene, en medio año, ha conseguido empetársela a los amarillos hasta los pelos de los güevos y ahora soy yo el que escribe el evangelio y algunas de las santas escrituras de la multinacional.

Y esto sucede cuando tengo tres o cuatro movidas macerándose y reptando en el Pacífico, que yo voy lanzando los anzuelos a diestro y siniestro y ellos van picando en ellos con gran desparpajo. Pero habrá que esperar por esas, hasta que maduren y estén listas para la cosecha.


3 respuestas a “Lo que va pa’llá vuelve pa’cá”

  1. Pues lo que tienen que hacer es poner su admiración por el elegido en forma de suculentos aumentos de sueldo, que la vida está muy cara… 🙂
    Salud

  2. Sin duda alguna tú serías el villano de la peli, o mejor dicho, te falta el gato y serías el malo del inspector Gadget, no se le ve, pero toca los huevos.