L’ultima notte di Amore


Una como Virtuditas, con lo ignorantona que es, lee el título de esta película y se pone cachonda pensando que con tanto rojo en el póster, esto es pornografía de hembras, de esa en las que no se ve chicha ninguna pero que de alguna manera hace que las hembras giman en el cine como burras en celo y se toquen la zambomba desenfrenadamente. Pues no, la película no va de eso pero es italiana y por primera vez en mi vida fui a la filmoteca a ver dos pelis italianas seguidas. Se titula L’ultima notte di Amore, que yo sepa no se va a estrenar en España pero estará en la plataforma digital y tal y tal de nombre de río de Sudamérica. Si le quieren cambiar el título al ponerlo en español, truscoluña no es nación aún está disponible.

Un julay que se retira al día siguiente tiene unas movidas que no veas, sin chimpún.

Tenemos un pavo que se va a retirar como picoleto y que supuestamente es honrado como braga de monja y se hace trabajillos adicionales de guardaespaldas y cosas así y después de que salvó a un capo chino haciéndole el boca a boca, lo contrata la mafia china y la cosa sale fatal, con un montón de muertos y un montón de movidas. Esto lo sabremos después, porque primero lo vemos llegando a su keli después de salir a correr y encontrándose con que su hembra le ha montado un fiestote sorpresa por el retiro. O algo así.

Al principio no tenía muy claro de qué iba la cosa, hay que esperar a dar un salto mágico hacia atrás en el tiempo porque la peli empieza en un pasado pero no en el más lejano y por lo que vemos al comienzo, con la fiesta sorpresa, es un masque del copón. Después llega la historia del policía y ahí ya tenemos algo interesante, con varios tipos de policía italiana implicados, corrupción por un tubo, la mafia china que también son unos regalitos que no veas y la hembra del policía que tiene unos ovarios como melones y a lo mejor hasta saben a fruta fresca pero como no hubo escena de él comiéndole el potorro, nunca nos enteraremos. La historia va teniendo sus abruptos giros dramáticos cada vez que se descubre algo, que más o menos se intuye porque allí nadie es lo que parece. Está muy bien lograda, entretiene, todo el mundo habla italiano, hasta los chinos y en el caso de esos, su italiano es fabuloso y se les entendía del copón, que a los otros, alguno es que masculla que no veas y no se pilla lo que dicen. Yo diría que esto es cine negro de ese que a mí no me mola demasiado. A propósito, lo del Amore del título es porque ese es el apellido del picoleto.

Si eres un miembro del Clan de los Orcos, no veas el siestote que te echarás si te pones a ver esto en la tele, pero cualquier miembro del Clan de los Orcos seguro que lo disfruta enormemente.


Una respuesta a “L’ultima notte di Amore”

  1. Siempre me gusto el cine italiano, incluso en sus horas bajas, así que es una buena noticia…
    Salud