Hoy llegamos al primer vídeo del viaje más traumático de mi vida y en el que puedo confirmar y confirmo que aunque no vi la luz al final del túnel, estuvimos a menos de diez metros de llegar allí, aunque para eso tenemos que respirar hondo y rezar para que procese los vídeos y lo podamos ver sin detalle alguno la semana que viene. Este era mi viaje de verano para pasar una semana en Gran Canaria y el avión, de Transavia, despegaba en Schiphol. La música para un evento tan antológico y melodramático es la canción Danger Zone, cantada por Kenny Loggins y que escuchamos por supuestísimo en Top Gun: Maverick, película de la que se sabe que es la mejor de la historia del cine, gracias sobre todo a Tom Cruise que es lo más de lo más y no me cansaré de repetir que allá en su día, yo estuve en un concierto de Kenny Loggins en Virginia y cuando cantó esta canción fue el A-C-A-B-O-S-E.
Comenzamos saliendo y corriendo a todo meter, que he aelerado el vídeo cuatro veces porque si no sería eterno hasta llegar al punto de despegue, que está tras un minuto y veinte segundos y a partir de ahí ya vamos sin acelerar el vídeo y despegamos y mira que tú que suerte tan grande que no vemos ni un campo de tulipanes porque, tripito y cuatripito para los bosmongolos y retardados, no hay tulipanes en junio. Eso sí, vemos los alrededores del aeropuerto por el sur del mismo, incluyendo un lago grande que hay por ahí y en el que se pueden ver cienes y cienes de barquitos porque el tiempo estaba muy bueno. Esa zona se ve muy linda para vivir pero te pasan por encima aviones cada dos minutos durante todo el día, con lo que es más bien un sinvivir. Crucemos los dedos para que sobreviva al aterrizaje de emergencia y podamos ver el vídeo.