En mi recorrido por Langkawi paré en una playa desde la que había una vista muy bonita de los islotes. Creo que se trataba de la playa de Tanjung Rhu aunque igual estoy equivocado. Lo cierto es que en los días que pasé allí, los contrastes entre el cielo y el mar eran alucinantes, con unas nubes que parecen de algodón y un cielo que de repente tenía un azul intenso y un momento más tarde cambiaba totalmente. Además, los islotes que están cerca me llamaban mucho la atención porque no hay ni un trocito de tierra a la vista, están totalmente cubiertos de vegetación. En la próxima foto veremos otra imagen tomada en la misma playa.
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Continúa la metamorfósis
Aunque parece que las cosas no avanzan, en realidad cada día la casa tiene un aspecto distinto. Desde el viernes hasta hoy martes, las paredes se han secado y ahora hasta parecen normales. Mi vecino mientras tanto ha continuado trabajando en la escalera y le ha puesto la junta que cubre el hueco entre la escalera y la pared. Además, ha vuelto a poner en su sitio todos los interruptores y enchufes y le ha dado una mano de pintura base nueva a la escalera, la cual queremos que esté terminada o a punto para cuando lleguen mis padres a inspeccionar la casa la semana que viene.
Os sugiero que comparéis las fotos de la anotación de ayer con las de hoy para que veáis el progreso y como se han ido secando las paredes.
Mientras finiquitamos cosillas de esta etapa, yo sigo mirando hacia adelante y ya estoy a la espera de que me digan la fecha en la que pondrán el suelo de la planta alta, ya que quiero que esté todo pintado antes de ese momento. La siguiente fase, por lo tanto, es la de pintar, algo que tenía planeado para este fin de semana pero que parece que haré al comienzo de la semana que viene junto a mi vecino, el cual se ha ofrecido de nuevo para el trabajo. Gracias a Dios yo no me siento culpable por abusar de la gente por culpa de mi carisma, doy por sentado que como el Elegido estas cosas suceden. Inicialmente pondremos una capa preliminar de pintura base en las paredes y después el color, el cual será un amarillo claro ya que me apetece ver mucho amarillo a mi alrededor. Ese será el color desde la entrada hasta la planta alta y en mi dormitorio aún no lo tengo decidido pero tengo tres alternativas y elegiré una de ellas.
Hablando del dormitorio, era el lugar en donde yo pensaba que las paredes no se secarían en la vida ya que son de hormigón pero gracias a mi potra máxima que ha traído temperaturas de veintipico grados a los Países Bajos justo cuando yo los necesitaba, las paredes están secas. Como sé que alguno está inquieto, no se preocupen que no pintaremos hasta la semana que viene y las paredes podrán secarse completamente.
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Bajo la cascada Temurun
Con el calor tan grande que hay en Langkawi, lo de pegarte a la cascada para mojarte un poco y engañar al cuerpo se agradece un montón. Tampoco es que te refresque porque el agua sale ya como pasada por un termo pero aún así, es agradable. El sitio es además de esos como los que vemos en las películas de aventuras en la selva, un rincón idílico en el que no se nota mucho la mano del hombre y donde te puedes sumergir en plena naturaleza. Cuando yo pasé por allí casi no había gente dado que era temporada baja y entre semana aunque imagino que dado el tamaño del aparcamiento, en otras épocas del año aquello estará petado y parecerá más bien una feria.
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Las paredes y su nuevo aspecto
Después de ver como recubrían las paredes de cola el día anterior, el viernes los obreros aparecieron a las 6.58 de la mañana y a las 7.01 yo cogía el piro de mi casa y me marchaba para el trabajo, ya que prefiero no ver lo que sucede y sufrir menos. En mi casa mientras tanto las cosas cambiaban rápidamente de aspecto y el suelo quedaba pringadísimo.
El día anterior el Rubio me había pedido que hiciera de canguro durante una hora en su casa y tras regresar a la mía y ver el desastre, cogí las cosas que me quería llevar y que básicamente eran magdalenas, lacitos, vino y jamón serrano y me fui directo a la estación. A posteriori esta fue una buena decisión ya que la humedad en mi casa era cercana al 100%.
Al día siguiente, después de desayunar y pasear en bici por la campiña, fuimos a ver a su hijo entrenar y desde allí salimos a recoger mis nuevas persianas. Sobre la una de la tarde llegábamos a mi casa y entrábamos en el caos máximo en el que se encontraba. Merece la pena fijarnos en el aspecto del dormitorio de invitados con toda la morralla dentro. Esa es la madriguera en la que he estado durmiendo los últimos días.
Tras quedarme solo limpié y volví a limpiar y al día siguiente limpié de nuevo e incluso hoy he vuelto a limpiar y parece que poco a poco la cantidad de suciedad disminuye. En las fotos se observa que las paredes aún estaban muy húmedas. Hoy se han secado bastante y la humedad en el interior está en torno al 45%, mucho menor que el 88% que había el sábado por la tarde o el 72% del domingo. A este ritmo espero que estén completamente secas para mañana. Las fotos las hice al llegar con el Rubio y antes de limpiar así que el aspecto actual es mucho mejor. Aquí tenemos el dormitorio:
Y las escaleras aunque están que resuman mierda, al menos tienen unas paredes que comienzan a parecer normales. Hoy ya más secas estaban mucho mejor:
Y acabamos con una imagen de la entrada de la casa:
Y terminar con una pequeña nota en el cuaderno de bitácora ya que además del Rubio, Waiting se ha desplazado desde su exilio en la Alianza de las inCivilizaciones del presidente Zapatazos para ver las obras personalmente y evaluar la situación.