Vampire Academy


De siempre se ha sabido que yo devoro literatura para adolescentes continuamente. Es uno de los problemas del síndrome de Pedro Pan, que me la sudan las historias de putetas tatuadas y con piercings suecas y prefiero las cosas ligeras y entretenidas sin más que no supongan ningún esfuerzo para mi cerebro. Creo que ya no me quedan amigos que no hayan intentado convencerme para leer las novelas de renombre y ninguno lo ha conseguido. Mis libros favoritos se mueven en el entorno de vampiros, zombies, bélicos espaciales, ciencia ficción y todo aquello que encaja en YA, lo cual viene de Young Adult y que me define perfectamente. Una de las series de libros que entran en dos de estos grupos es la de Vampire Academy y por supuesto, me he leído (o escuchado el audiobook) los seis libros de la serie, con lo que soy un experto en la misma. Por eso, cuando se estrenó Vampire Academy fui a verla. En España se estrenará creo que la segunda semana de mayo con el mismo título, sin traducir, así que por si alguno tiene dudas, se puede traducir como truscoluña no es nación.

Una julay es la mejor amiga y protectora de una princesa vampírica pija y algo borde que parece que necesita una buena follá

Una chama que es medio humana, medio vampira se entrena para convertirse en la guardaespaldas de una princesa vampiro que resulta ser su mejor amiga. Ambas están en la edad de los picores en el pavo y no paran de rastrear el internado en el que las tienen presa buscando un rabo con el que calmar el picor. Al parecer hay también unos vampiros malos y una guerra desde tiempos inmemoriales entre ambos grupos y como siempre, las cosas se salen de madre.

La verdad que me sorprendió que decidieran hacer la película porque esta serie carece del principal ingrediente de todas las otras, o sea, de un macho cabrío por el que gima la hembra y que llegado el momento, la mate a polvos. Bueno, hay uno para cada una pero como que son totalmente secundarios hasta el tercer libro o así, con lo que en este aparecían como referencias secundarias. La película se aleja de la historia en el libro lo suficiente pero en ningún momento logra enganchar al espectador. Seguramente el problema es que sin leerte los libros, es algo confusa y las dos protagonistas no tienen carisma alguno y en el caso de una de ellas, tengo mis dudas sobre si puede realmente actuar. Lucy Fry es la que no puede o no quiere actuar, le debieron decir que estaba en una pasarela y eso es lo que hace y cuando habla, la caga. La pobre es mala de vicio y si no fuera porque está como el pan con mermelada de moras, ya estaría clamando por un juicio rápido en el tribunal de la Haya y que le prohíban actuar en su vida. La otra, Zoey Deutch, tiene algo más de tablas pero de las necesarias para las series del canal Disney, esas malísimas que te ponen a dormir al instante. Entre las dos joden la película y no hay manera de salvarla.

Una lástima. Quizás por intentar meter demasiadas cosas del libro acabaron con un producto confuso e incompleto y demasiado complejo para la mente simplona de cualquier miembro del Clan de los Orcos y demasiado simplón para los sofisticados cerebros de los sub-intelectuales de GafaPasta. O sea, para ver una tarde de domingo en Antena Triste o Telajinco después de comerte una fabada y acabar con una barriga de embarazo de catorce meses.


4 respuestas a “Vampire Academy”

  1. Pena, porque me ponen las pelis de vampiros. Ay, cómo echo de menos a Buffy, necesito hacerme un maratón de capítulos, pero ya.

  2. «They suck at school»??????? <<– y luego hablas de titulos… madre mía….