Ha llegado la hora que ninguno nos temíamos y estamos en el mirador del Burj Khalifa, que no está tan alto como el edificio y que era con ventanas, supongo que para evitar los chorros de calor infernal. Aquí estamos mirando hacia el sur y eso que parece una piscina abajo es lo que ellos llaman el lago del Burj Khalifa y desde por ahí es desde donde he hecho las fotos que hemos visto de la mole. En la foto también se puede ver y sentir la calima porque aquello es EL DESIERTO, por más que levanten bloques de hormigón y bueno, que habrá muchos a los que les parezca fascinante y alucinante pero yo ya lo vi y no quiero volver a visitarlo nunca jamás.