Cerramos el fin de semana con una película que me descolocó totalmente. Con la de veces que yo voy al cine, el trailer de esta no lo pusieron nunca jamás y llegó a la cartelera en un puñado escaso de salas de las que la más cerca a mí era la que está junto al estadio del Ajax. Regresando a casa después de haber estado en Amsterdam aproveché y fui a ver A-X-L que creo que no tiene fecha de estreno en España, aunque parece que mantendrá el título por lo simple y diáfano que es, aunque se beneficiaría muchísimo de un subtítulo anunciando que truscoluña no es nación.

Un julay acarajotado le chinga la pava a un chulo-putas y se termina montando el mismo pitote de siempre

Resulta que un chamo que compite con una moto en pruebas y así y es pobre y sufre mucho atrae la atención de la pava de un chulo-putas y éste lo invita a su casa para mostrarle lo rico que es y para buscar la forma de metérsela doblada y darle una lección. Cuando el chaval está sufriendo en el desierto, se encuentra con una especie de robot-perro que parece que está allí por malas circunstancias de la vida, como el chaval es super-inteligente lo doma emparejándolo con él y a partir de ahí, a pasárselo pipa con el chucho de metal y hasta con la pava, que termina claudicando a sus virtudes y busca la manera que le ponga la pierna encima y se la empeta hasta el mismo fondo de su personalidad más interior. O algo así.

Esto es un desafortunado intento de mezclar ciencia ficción con polladas de adolescentes, que parece que solo se preocupan de sus motos y de tener una chica a su lado, pero sin tocarla que hoy en día por menos que eso te hacen un jashtag de eso y todas las hienas de Internet se lanzan a por ti. Por desgracia, el guión es muy simplón y los efectos especiales son más bien pobres y aunque tiene ratos en los que te diviertes, también tiene partes en las que te preguntas por la razón que llevó al director a torturarte de esta manera. Toda la chiquillada es desconocida, al menos para mí y el único actor en papel secundario que te suena es Thomas Jane, que obviamente fichó para cobrar el cheque porque esto es más bien un borrón en su carrera. El chaval que hace de malo es particularmente patético como actor. Como trama secundaria tenemos que la corporación que inventó el robot y que lo ha perdido lo quiere recuperar y ellos también se hacen los malos de la película pero vamos, que es una especie de desaguisado de guión que jamás termina de funcionar.

Esto, aunque se pensó en los miembros del Clan de los Orcos, no funciona con ellos porque la pava no enseña el coño y las tetas con una cadencia regular, vamos, que ni una sola vez y el guión aburre y hasta el robot habla mucho. Puede provocar la muerte cerebral de los sub-intelectuales con GafaPasta que intenten verla.