Skyfall


Aunque parezca difícil de creer, se han cumplido los primeros cincuenta años de las películas de James Bond, agente 007 y posiblemente el espía que peor hace su trabajo en el universo ya que todos lo conocemos. En esas cinco décadas todos lo hemos visto metamorfosearse, cambiar de piel y transformarse de un actor a otro. Creo que hasta ahora ha habido bastante consenso conque el mejor de todos, el más genuino, el real, fue el interpretado por Sean Connery. Yo estaba en ese grupo y aunque no creo que sean obras maestras, siempre he pensado que las películas de su época como agente 007 merecen un 9 y en el peor de los casos, un 8 cuando se vuelven demasiado melosas. De las dos últimas películas de James Bond, que coinciden con las dos primeras de Daniel Craig ha quedado constancia por ésta la mejor bitácora sin premios en castellano. Casino Royale me gustó y me lo pasé muy bien y Quantum of Solace me pareció mala tirando a mierdosa, así que no esperaba que la cosa mejorara y más cuando han dejado pasar cuatro años para que todos nos olvidemos de aquel tostón. Parece que se lo han tomado en serio y la vigésimo tercera película de James Bond, la cual se titula Skyfall se acaba de estrenar y es muy buena.

Un julay que trabaja para la pasma las pasa canutas para llegar a fin de mes chingando todos los días

La película comienza con James Bond persiguiendo un malaje por Estambul y siendo asesinado, con lo que nos ahorran el tener que esperar hasta el final para saber si muere. Después, mientras el malo de turno y que no se sabe muy bien quien es comienza a dar palos al MI6, descubrimos que sin necesidad de una de esas falsas brujas de Telajinco, James Bond regresa para poner los puntos sobre las íes y jincársela hasta los pelos de los huevos a las chamas que se le ponen por delante. Desde aquí hasta el final, un derroche de adrenalina que no veas.

Esta es para mí la mejor película de James Bond hasta el momento. Sin discusión. Así de claro. Una historia oscura, un protagonista que está de vuelta de todo, torturado, complejo y que parece sacado de una película de Cristopher Nolan, un guión que nos lleva en una montaña rusa de acción en la que siempre cabe el aun más increíble y que pese a todo, no te hace reírte por lo volátil que es lo que has visto. Un montón de detalles, realmente un montón, con pequeñas cosas que reconoces del universo de 007, a veces iguales, a veces cambiadas, a veces para explicar algo que no conocíamos y en otras para recordarnos que estamos viendo una nueva película de un héroe que quizás siempre ha sido villano. Daniel Craig sabe actuar y aquí lo hace. No se limita a poner caras de guapera, ni siquiera oculta la edad, salta, corre, patea, lucha pero también se queja del esfuerzo porque no es un chaval de veinte años. Enfrentándolo a él y en muchos momentos eclipsándolo totalmente está Javier Bardem, un actor que a mí personalmente me cae mal y puede joderme una película con su mera presencia pero que aquí ha bordado su trabajo, ha conseguido fabricar el malvado más deleznable de todas las películas de esta saga y uno que será muy difícil que puedan superar en las próximas películas. Javier Bardem mira a la cámara, mueve tres o quizás cuatro milímetros una ceja, emite un sonido en su garganta sin llegar a crear una palabra y consigue que toda la sala de cine contenga la respiración. Nos identificamos con su personaje y según vamos llegando al momento cumbre de la película, la frontera sobre quienes son los buenos y quienes son los malos se van difuminando y esta confusión trabaja junto con el guión para crear un final épico.

En esta película decimos adiós a algunos de los personajes secundarios y damos la bienvenida a otros nuevos. Como decía Mufasa, es el círculo de la vida. 007 se sigue reinventando, sigue persiguiendo chusma y gentuza y retirándolos de la circulación, ya sea tomando una cerveza o con un cóctel, siempre bien acompañado, siempre escapando por los pelos de las situaciones más absurdas y peligrosas.

Este peliculón merece que te asomes a la ventana y grites convocando a todos y cada uno de los miembros del Clan de los Orcos. Esta es una salida obligatoria, no debe faltar ninguno, ni siquiera las hembras, todos tenéis que ir en manada a un cine a ver esta película y creedme, es una pasada, de lo mejorcito en el cine de acción que hemos visto en mucho tiempo. Hasta los intelectuales con GafaPasta tendrán que reconocer que tiene mérito. No te la pierdas.


4 respuestas a “Skyfall”

  1. Me pasa algo como a Darliz, las películas de James Bond actuales ni fú ni fá, demasiado efecto especial y demasiado fantasmosas para mi gusto. En cambio estos días están poniendo alguna en la tele con Roger Moore como James Bond y tenían mucho más humor, a veces salían con unas coñas inesperadas que te partes de risa (bueno, y escenas impagables como la persecución del dos caballos amarillo).