Star Wars: The Clone Wars


Cuando vi por primera vez el trailer de la película que quiero comentar hoy, aluciné por la elegancia visual de las imágenes. Sabiendo que son generadas por ordenador, tenían algo que las hacía muy especiales. Siendo una historia del universo de la Guerra de las Galaxias y dado que yo soy fans desde pequeñito, sabía con una certeza absoluta que iría al cine a ver Star Wars: The Clone Wars y crucé mis dedos para no tener que arrepentirme. Hubo suerte.

Un julay Jedi rescata al hijo de un traficante poligonero

Lo primero que conviene saber es que la historia está ambientada entre los episodios segundo y tercero. Es decir, toda la basca está disponible y deseosa de participar y el reverso zarrapastroso aún no ha ganado. Tenemos una hartada de Jedis y malos malísimos y en esta ocasión, la lucha es por liberar al hijo de Jabba el Hut, ese gordo asqueroso que ha salido en prácticamente todas las películas y que tiene cara de vivir en alguno de los barrios de la periferia de la ciudad. La misión se la asignan a Annakin Skywalker, el cual acude con un equipillo de clones al lugar en donde la bestia fea y babosa está cautiva y lucharán por liberarlo.

Inicialmente este debía ser el piloto de una nueva serie para televisión pero finalmente decidieron ponerlo en cine. Cuando ves las imágenes lo entiendes. Es soberbio. La historia está en la línea de otras de la Guerra de las Galaxias, simple y básica y con mucha batalla de por medio aliñadas con conversaciones chispeantes entre los protagonistas. En el lado negativo está el cambio de voces de algunos protagonistas, que en inglés ya no tienen a los actores que les dieron vida y que hace que suene un poco raro. En el lado positivo, es Star Wars, más de lo mismo para los que nunca tenemos bastante. Yo ya sé que me engancharé a la serie una vez se estrene este otoño. Si sigue la pauta comenzada en esta película, será muy dinámica, llena de acción y en un universo que todos conocemos muy bien. Salen todos: Yoda, el Conde Doku, C3PO, R2, la Princesa Amidala y no sale ese al que todo el mundo odia y que sigue siendo lo más molesto y a la vez divertido del primmer episodio.

Hay poco más que se pueda decir. Si eres fans, esta la tienes que ver. Si te la resbala esta serie, seguramente podrás vivir sin verla.