Los vídeos de la inmersión comenzaron en La inmersión en la Punta de la Mona, primera parte

Que emoción tan grande nos da al llegar al segundo de los tres vídeos en los que se divide esta inmersión. En este caso, la canción que lo acompaña es Wait de M83, una que me ha gustado desde siempre. Aunque hay un tercer vídeo, en ese habrá segmentos en la superficie, así que será un pelín distinto a este, en el que después de comprobar que la corriente era muy fuerte y no podíamos salir por fuera de la Punta de la Mona, tuvimos que quedarnos en la zona en la que estábamos protegidos por la susodicha.

Comienza acercándome a algo que parece una anémona y que resalta en aquel lugar y después tenemos a mis amigos buceando pa’quí y pa’llá, que no me cansé de grabarlos y hasta de cuando en cuando sale de Uitverkorene. Sobre el primer minuto, Sergio el joven se quita el regulador de la boca y sonríe, en una operación de máximo riesgo y máxima dificultad ya que nunca se sabe si podrás volver a respirar de tu botella y yo por ejemplo, no suelto la cosa esa ni aunque pase una sin bragas por delante y nos haga un avistamiento subacuático espectacular, aunque en ese caso lo grabaría que por algo llevo siempre la cámara cuando estoy ahí abajo. La visibilidad era tan mala que hay veces que parece que estamos en el gran Azul, en pleno océano abierto. Sobre el segundo minuto pasamos entre dos rocas y con la linterna que está sobre mi cámara aparecen los colores que no estamos viendo por la falta de luz. También tenemos un pulpo que salió por patas pa’l fondo cuando Guido lo iluminó con su linterna. El capullo del pulpo se escondió muy bien y no pudimos llevárnoslo, que eso se come. Tras esto tenemos un banco de peces que también dan hambre y seguimos buceando entre las rocas. Cerca del final tenemos a dos peces super-hiper-mega camuflados pero que vemos perfectamente gracias a mi linterna.

Y todo esto acaba en La inmersión en la Punta de la Mona, tercera parte.