No te preocupes, no llegará lejos a pie – Don’t Worry, He Won’t Get Far On Foot


Después de volver de las vacaciones me costó un poco coger el ritmo a la película sorpresa de los martes, aunque la razón fue en las lluvias que caían ese día, que combinadas con la película que ya sabía que ponían me hacían abandonar la empresa y no ir al cine. La de hoy estuve a punto de dejarla pasar porque el trailer, cuando lo vi, no me pareció gran cosa y pese a que no llovía me daba pereza ir al cine a las nueve de la noche en bici, ver la película y volver a casa a las once y pico. Tras dudarlo, finalmente decidí apechugar e ir a ver Don’t Worry, He Won’t Get Far on Foot, película que se estrena en España en un par de semanas con el título de No te preocupes, no llegará lejos a pie.

Un julay las pasa putas y canutas

Un chamo borrachuzo que no veas, de esos que pueden confirmar y confirman que tienen un problema con la bebida, tiene un accidente de tráfico mientras su coche lo llevaba otro borrachuzo y acaba cuadrapléjico o algo así. El tío como que sigue alcoholizado y en silla de ruedas y en cierto momento se apunta a un grupo de borrachuzos anónimos y el que lo lleva en el proceso es un mariquita desbocado pero adorable. En estas que descubre que puede hacer viñetas y que su humor negro y cínico mola a un periódico y acaba colaborando con el mismo y a la vez, comiéndole el potorro a una azafata que se chifla toda cada vez que le lamen los bajos.

Una de esas películas basadas en la vida de alguien que no conocíamos hasta ese momento. La dirige Gus Van Sant, uno de esos directores que de cuando en cuando reaparece con una historia interesante y aquí la tiene. Para mi el principal inconveniente es Joaquin Phoenix, que siempre tuve la sensación que estaba sobre-actuando. Exagera demasiado borracho y exagera aún más cuando está en la silla de ruedas y eso le hace perder credibilidad. Pese a él, la película funciona por los personajes secundarios y sobre todo por Jonah Hill, que borda su papel de ex-alcohólico y mariquita rico y le roba todas y cada una de las escenas en la que aparece al protagonista. La película tiene momentos cómicos que funcionan muy bien pero en las escenas dramáticas pierde un poco el ritmo y cansa. Probablemente si hubiesen usado la tijera y eliminado unos veinte minutos, estaríamos ante un peliculón.

Esto es un cine demasiado serio para gustar a los miembros del Clan de los Orcos pero sí que puede llamar la atención de los sub-intelectuales con GafaPasta.


Una respuesta a “No te preocupes, no llegará lejos a pie – Don’t Worry, He Won’t Get Far On Foot”