Otra de las sorpresas en el recorrido en barca por el río Ngo Dong son las cavernas. El río se esconde tres veces bajo las rocas y las barquitas pasan por esas cuevas muy bajas. En la foto vemos las barquitas llegando a una de ellas, creo que la más larga de las tres. Si algún día regreso a Hanói, esta es una excursión que pienso volver a hacer.
Por todos lados en Estambul, pero más particularmente por las barriadas populares, siempre hay gente apatrullando la ciudad. Están a la casza y captura de cosillas, como pueden ser papeles, recipientes de plástico, latas, cristales, ropa, cada uno parece especializado en algo distinto y se mueven con unas enormes zacas con ruedas como las que se ven en la foto. El problema es hacerles foto, ya que alguno son agresivos y por eso, esta la hice desde la planta alta de un bar en el medio de la nada. Un día antes había visto a dos mujeres que parecían gitanas, una joven y otra muerta, enterrada y resucitada como zombie. La joven arrastraba un trasto de esto que debía pesar una burrada y la otra se te echaba encima y te pedía dinero, daba instrucciones a la chica joven y mendigaba y le recriminaba su trabajo o la eficiencia con la que lo ejecutaba. Era como una jefilla de esas tocapelotas que te dan la vara a tutiplén. La gente las veía acercarse y se cambiaba de acera para evitar la confrontación con la viejilla, que nunca conseguía dinero de nadie pero que no cejaba en su intento y de gratis te ponía en las cercanías de piojos y vete tú a saber que más llevaba.
Los de la foto iban por la calle, caminando en el carril de dirección contraria, bloqueándolo y sin que les importara lo más mínimo. En fin, cosas de otros mundos que definitivamente no son como el nuestro. En los Países Bajos, no creo que puedan recorrer más de doscientos metros sin que llegue la policía y les empiece a poner multa tras multa por todas las violaciones de la ley que seguramente cometen sin saberlo.
Hoy tenemos más de lo mismo pero con un poquito diferente. Sigo en el río, en una barca, rodeado de otras barquitas como la mía, con las torres cársticas a los lados, imponentes y recubiertas de vegetación pero en esta foto podemos ver también los arrozales, las plantaciones de arroz que están a la vera del río.
Ayer se presentaban las Distorsiones del 2016, el nuevo y blanco aspecto que tendrá esta bitácora durante los próximos meses y que continúa tradiciones ancestrales y enraizadas brutamente por aquí.
Siguiendo la racha de semanas increíbles y con relatos de ciencia ficción de la mala, la semana pasada tuvimos una nueva andanada de vídeos y hasta fotos épicas en Regresando a Estambul y acabó en Algunas cosillas del fin de semana en Estambul. También relacionado con el fin de semana en Estambul tenemos el desmenuzamiento exhaustivo del pallufo del Espectro de los cojones, la nueva bazofia de zerolo-zerolo-7. Entramos en el fin de semana con Tortura y odio profundo y enraizado y algo más. Esta es la semana de la GUERRA DE LAS GALAXIAS y cuando llegue el fin de semana me piraré para Edimburgo a ver aquella barriada periférica.
Comenzamos la semana en los alrededores de Hanói viendo un Pórtico y vendedores en los templos de Hoa Lu y si todavía hay alguno que se pregunta qué puede haber tan especial en Asia para que yo siga regresando año tras año, la Excursión en barca en Tam Coc, la Procesión de barcas en el río Ngo Dong, el Tráfico de barcas en el río Ngo Dong o el fabuloso Río, pequeño templo y torre cárstica en Tam Coc responderán a esa pregunta.
Si eres uno de esos pollabobas que van andando con la mirada fija en el teléfono demostrando lo deleznable que eres, ojalá que vayas de vacaciones a Turquía, te pongan en una décima planta y con algo de suerte No Miras antes de entrar y te vas a tomar por jauer, todo sin acritud ¿eh?
Fui a ver cinco películas al Cine, superé la barrera de las DOSCIENTAS películas vistas en una sala a lo largo del año 2015 y comenté tres por aquí. Comenzamos con la agradable sorpresa de Krampus. Maldita Navidad – Krampus, de la que me esperaba mucho menos. Continuamos con la entretenida e interesante En el corazón del mar – In The Heart Of The Sea y acabamos a carcajadas con la sorpresa de Los tres reyes malos – The Night Before. En este momento el contador de pelis está en doscientas cuatro y ya tengo entradas para al menos tres pelis esta semana con lo que el récord del año pasado tiene los días contados. El año pasado llegué a esa cifra con la película You’re Not You y no podemos mirar más atrás en el tiempo porque nunca antes en la historia del universo conocido vi tantas pelis en un círculo alrededor del Sol.
La comida que salió de mi cocina fue la siguiente:
Y así transcurrió la semana pasada.
