Personal Shopper


A veces me pregunto por qué no me doy de coscorrones a mi mismo cuando hago la planificación de películas y procuro filtrar un poquito más y en lugar de vetar las basadas en libros del comemielda del Tolkien y dirigidas por el julay del Jackson o basadas en la saga de las cincuentas mierdas de calentorra, extiendo un poquito más el concepto y abarco todas esas cosas que ya me dan un mal rollo que no vesa en el trailer o en el poster, como la película que voy a comentar ahora, la cual jamás de los jamases vi en trailer alguno y solo la puse en mi lista porque era lo único que me faltaba por ver. Se trata de Personal Shopper y solo algún Dios sabe si se estrenará en España.

Una julay pitonisa mieldea sin ton ni son

Una pava que parece ser pitonisa como la bruja Lola o algo así y que según ella puede sentir los espíritus, trabaja haciéndole los recados a una bloguera famosa o algo así. Se pasa un par de noches en una casa buscando espíritus y después le entra una movida rara por ponerse la ropa y las joyas de la bloguera sin que esa lo sepa mientras recibe mensajes de un vicioso que ella cree que es su hermano o alguien parecido.

Decir que esto tenía un guión es insultar al papel que se usa para imprimir un texto. Estamos ante una estúpida idea de una película que fracasa a la hora de pillar un género, ni tiene drama, ni tiene misterio, ni tiene thriller. ES un popurrí de momentos sueltos con una pava gilipollas haciendo recados y visitando kelis. Lo único que sacamos en claro de la película es que en un momento determinado Kristen Stewart enseña las tetitas y desde ese instante me ha surgido una idea en el cabezón sobre la reducción pectoral de las tortilleras, que al cortárseles la leche como que pierden tetas y se machorran todas y esta es un buen caso. El pobrecito Edward se pasó cuatro películas esperando para montarla y preñarla, con unos güevos como sandías y que seguramente eran más grandes que la desgracia de tetillas que vemos. Me ensaño con el asunto porque es lo único que recuerdo de la película, es tan sosa, tan mediocre, tan aburrida, tan estúpida que por más que lo pienso, solo recuerdo como batí un récord de velocidad entre mi butaca y la puerta del cine y las nano-tetas de la chama, que en ningún momento consigue actuar y pasea su cara de Bella-no-come-polla de aquí para allá y casi que cuando está mejor es cuando va con el casco que no nos deja verla en la motocicleta y la doble actúa muchísimo mejor.

Espero y deseo que no se estrene en cines en España pero de hacerlo, por Dios, que alguien advierta a los miembros del Clan de los Orcos porque pueden padecer daños cerebrales severos en la única neurona que tienen. Puede provocar vómitos y quizás hasta diarrea a los sub-intelectuales con GafaPasta.


3 respuestas a “Personal Shopper”

  1. Debieran permitirla solamente en Truscoluña para políticos truscolanes en exclusiva, y obligarles a verla una semana seguida…jajaja
    Salud