No sé qué demonios ha pasado pero llevamos seis meses con peli tras peli de negros, no paran de pasar por cartelera, todas son pseudo-comedias y juraría que casi todos son siempre los mismos actores, aunque igual me equivoco porque como no me interesan en absoluto, no suelo fijarme. Todas estas películas tienen en común un bajo presupuesto y que parece que apuntan hacia la raza negra para recuperar el dinero, así que hay mucho amaneramiento de color, mucho calificativo de Niger entre ellos, ese que no se permite que se los digan los blancos y mucha verdulera que agita las manos como un molino de viento. La última de estas películas es además un remake de una de Mel Gibson del año de María castaña. Se llama What Men Want y al parecer es tan irrelevante que ni se han planteado estrenarla en España, ni siquiera con el fantástico título de truscoluña no es nación.
Una julay negra después de una tranca puede escuchar los pensamientos de los machos y aprovecha para follarse a todo negro que esté en su vecindario.
Una pava que trabaja en una empresa en la que todos los demás son machos y como muy alfas, tras una visita a una camello-pitonisa y una hostia del copón borracha como una cucha acaba siendo capaz de escuchar los pensamientos de los machos y usará el poder para conseguir al macho que se quiere follar y para medrar en el trabajo a cualquier precio y más bien temprano que tarde se dará cuenta que lo que parecía una ventaja es más bien una maldición porque ella es una borde que no veas y hará lo imposible por quitarse ese poder malévolo de encima.
Básicamente, esto es un popurrí de homofobia, racismo, misoginia y sexismo en el que por alguna razón, las hembras negras no hablan, siempre gritan, el mariquita es como alelado y los machos parecen más bien compañeros de clase de Forrest Gump. Si había alguna escena de cachondeo la debieron planear para otro tipo de público porque yo me aburrí y miré el reloj mil veces en las dos horas que dura la película esperando que acabara. El final es previsible y patético y sales del cine o más bien corres para huir del cine pensando que has perdido un tiempo precioso que jamás lo podrás recuperar. En fin, algo para olvidar.
Esto no vale ni para los miembros del Clan de los Orcos, ya que no hay tetas ni chochos ni culos, solo negras con lycras de colores gritando como verduleras ni vale para los sub-intelectuales con GafaPasta, que definitivamente no se acercarán a los cines en los que la puedan estar poniendo. Una de esas para quemar el disco duro en el que la tienen y hacerle un favor a la humanidad.
2 respuestas a “What Men Want”
🙁
Salud
Pues ya has puntuado alto para haber escrito esa opinión! Un cuatro es casi un aprobado!