Hoy tenemos la receta que es la sensación desde que la hice por primera vez y que es un secreto de mi familia que no queremos compartir, pero por suerte, como para hacerla tienes que tener una olla exprés eléctrica, es más que probable, posible y plausible que ninguno nos la pueda afanar. Tengo que decir que tanto mi madre como mi hermana son superfans y a los colegas que la han probado al venir a mi casa, se han ido encochinados, esto es un vicio que no veas. Para hacerla solo hace falta la olla exprés y los ingredientes y básicamente, en aproximadamente una hora puedes tener un plato alucinante. Mi versión es un pelín distinta a la original porque yo le meto más tomate concentrado y natural y menos sal.

Los ingredientes: Medio kilo de muslos de pollo deshuesados (o con hueso y piel), 2 tazas de arroz de grano largo vaporizado (también vale arroz Jasmin o Basmati, pero queda muchísimo mejor con el vaporizado), medio litro de caldo de pollo, 1 cebolla cortada en rodajas, 6 dientes de ajos picados, 2 zanahorias (unos 200g de zanahoria, que hay algunas que son como pepinos de grandes) cortadas en rodajas, 2 tomates cortados a la mitad y después en cuartos, 1 cucharada (o dos) de puré de tomate concentrado, 1 cucharada de aceite de oliva, orégano y albahaca secos, 2 cucharadas de salsa de soja y sal y pimienta.

La implementación: Ponemos la olla exprés en el modo de freír y cuando esté caliente, echamos la cucharada de aceite para que se caliente. Mientras, echamos sal y pimienta sobre un lado de los muslos de pollo y los colocamos en la olla con la sal y pimienta hacia abajo y los freímos unos minutos. Echamos por encima más sal y pimienta, les damos la vuelta y seguimos friendo. Los sacamos y reservamos.

Echamos la cebolla en rodajas y el puré de tomate concentrado y sofreímos un par de minutos. Añadimos un buen pizco de orégano y de albahaca seca seguimos con el sofrito un minuto más y después ponemos los ajos picados y seguimos medio minuto mientras revolvemos bien. Paramos el modo de freír en la olla.

Echamos un pelín de caldo de pollo y con una cuchara de madera nos aseguramos que no haya nada pegado al fondo del caldero de la olla. Ponemos en la parte más baja los muslos de pollo y las zanahorias, echamos la salsa de soja, el arroz y el caldo de pollo, que hay que asegurarse que cubra todo el arroz. Se ponen los trozos de tomate por encima.

Cerramos la olla y la programamos a siete minutos con alta presión. Si alguien lo hace con pechugas, el tiempo serían 5 minutos. Si se usan otros arroces, igual también hay que ajustar, pero con los tres que he nombrado y los muslos, los 7 minutos son suficientes. Se pone la olla en marcha.

Cuando acabe, esperamos doce minutos y en ese instante le quitamos la presión a la olla y la abrimos.

Se mezcla todo bien con una cuchara y se sirve. Eso que se ve en la foto en el medio son judías negras conservadas en aceite de chile para darle algo más de sabor, totalmente no necesario en la receta pero algo que yo suelo añadir a casi todo lo que cocino.