La semana pasada en Distorsiones


Si no fuera por ese ego elefantiásico que me han descubierto hace poco y que espero no sea contagioso no sé que sería de mi. Llevo unos días en los que no doy abasto entre pitos y flautas y eso se nota en la frecuencia y la calidad de los escritos que ha acabado por resentirse. Este fin de semana que viene lo pasaré en Roma en mi segunda visita del 2007 porque (y quiero que esto quede muy claro) Roma me ha parecido una de las ciudades más hermosas que he visitado en mi vida y definitivamente el mejor de los destinos de este año, muy por encima de Madrid, Salamanca, Ávila, Segovia, Pisa, Florencia o Barcelona, lugares en los que fui visto. Y siguiendo con esta última ciudad, no veas tú el cachondeo que hay con algunos de mis amigos que leen la bitácora y no comentan a cuenta de Barcelona. Recordaréis que cuando narré el viaje hubo una línea de comentarios muy interesante sobre como el transporte holandés era tercermundista porque en realidad el transporte perfecto era el de esa ciudad. No han pasado ni seis meses de esos comentarios y me da la impresión que son más fiables los medios de transporte públicos de Calcuta que los de Barcelona y los holandeses, en todo ese tiempo, han seguido con su inaceptable puntualidad por encima del 90%, algo impropio de un país que debería aspirar al 100% y nada más. Esto viene a cuento de las Comparaciones variadas que estoy aprendiendo en mis clases de neerlandés.

Esta semana pasada también hemos visto una foto de Mi vecino el erizo al cual observo Desde mi atalaya, ese lugar en alto y rodeado de ego por todas partes. Espero envasarlo y comenzar a venderlo próximamente para que todos puedan tener acceso al mismo ya que cura enfermedades y os hará la vida más feliz.

Cambiando de asunto, las fotos de esta semana fueron de la ciudad de Rotterdam y pudimos ver el Erasmusbrug, El Erasmusbrug desde el Maas, el Euromast, la iglesia de Grote of Sint-Laurenskerk, el monumento De Boeg y unas Grúas en el puerto.

Pase lo que pase, el Cine nunca deja de formar parte del cóctel semanal y en esta ocasión comentamos la curiosa y entretenida 30 Days of Night – 30 días de noche y la maravillosa Hairspray.

Acabamos con La conexión pringles paprika que se ha montado uno de mis amigos para conectar a sus padres a Internet y con esto y un bizcocho nos vemos en una o dos semanas ya que el lunes que viene estaré regresando a Holanda y no sé si habrá resumen.

Mi cumpleaños ya está a la vuelta de la esquina. Rebuscad en el baúl:


4 respuestas a “La semana pasada en Distorsiones”

  1. Hombre, yo soy de Barcelona y en principio no voy a dejar de comentar porque digas que el transporte allí es de puta pena. Bastantes tacos solté la última vez que llegué a esa maldita ciudad infernal y lo que vi montado en la estación de Sants me recordó a Marruecos. Ya me gustaría a mí que no fuera así, pero es lo que hay. En Holanda no tengo tanta experiencia, pero de momento nada parecido.

  2. Respecto a la referencia a la estación de Sants del anterior ponente, yo manifiesto que tenemos al Tercer Mundo metido en nuestras ciudades, y parece ser que es porque España está obligada a resolver los problemas de empleo y pobreza de todo el Orbe.

    Y nosotros estamos obligados a callarnos o a que nos repriman como a peligrosos racistas.

    Estoy hasta las pelotas.

  3. Rodolfo, en Europa en un par de años pedimos a los constructores del muro israelí que hagan otro en el sur de Francia para proteger al continente de la miasma de la península y os dejaremos aislados mil años a ver qué pasa por ahí abajo. Por esta razón ya tengo carnet de conducir holandés y en un año espero tener pasaporte, que así será más fácil solicitar la reunificación familiar y traerme a los parientes cuando la cosa se vaya al coño por esas tierras.

    A propósito, me tienes el corazón partío. En tu bitácora solo se puede entrar con pasaporte V.I.P. y a mí no me lo has concedido. Seguro que en su interior hay unas movidas interesantísimas que me estoy perdiendo y eso que yo soy una bella persona de ego modesto de verdad.

  4. Uy…lo del muro no es mala idea…pero yo había pensado en algo más elaborado. Al fin y al cabo hay ciertos dictadores que dieron unas ideas muy útiles aunque al utilizarlas se liaron un poco. Yo casi estoy por crear armas que afecten única y exclusivamente a esas personas que tienen el gen de la gilipollez. Porque estoy segura de su existencia.