Morning Glory


Pon una película en cartelera con sus protagonistas jóvenes y guapos y se gastarán fortunas en promocionarla aunque la historia no valga nada. Haz lo mismo con una buena película en la que la mayor parte de los protagonistas están haciendo cola a la puerta del asilo de actores y parece que se avergüenzan y la ocultarán y tratarán que pase desapercibida. Algo estúpido y absurdo porque el cine es el cine y hay espacio para todo tipo de historias, algo que no comprenden los come-mierda de los que manejan la industria de la distribución. Así, mientras promocionan otras cosas mucho más mediocres, Morning Glory la han tratado de colar por la puerta de atrás y es una película que se merece mucho más. En España se estrenó esta semana con el mismo título.

Una julay ejecutiva agresiva a la que se le ha caducado la almeja por no darle de comer cambia de trabajo y se las apaña para joder la vida a todo quisqui

Una productora de televisión pierde su trabajo y de chiripa encuentra otro en Nueva York, a cargo de un programa matinal de noticias que languidece y está a punto de desaparecer. Al llegar realiza unos cambios drásticos que no parecen funcionar y tendrá que trabajarse duro al nuevo presentador para que el hombre funcione en pantalla. Mientras tanto, se le resucita el piporro cuando conoce a un chaval en la oficina del que se deja poner la pierna encima sin levantar cabeza, aunque con el teléfono móvil siempre a mano por si surge alguna noticia.

Cuando comienza la película me recordó un montón a aquellas comedias que se hacían en los ochenta y principios de los noventa también ambientadas en los estudios televisivos con equipos de periodistas y redactores. La cosa es que fue mejorando poco a poco, el humor es muy fino y acertado, el guión es un buen ejemplo de lo que pueden conseguir un equipo de profesionales cuando se lo proponen y el director supo dejar que la cámara ame a los protagonistas. Harrison Ford nos regala a sus casi setenta años con un papel cachondo y cínico que quizás sea el último cómico que le veamos y Diane Keaton también está soberbia.

Resumiendo, una buena comedia, con ligeros toques románticos y que te deja con un muy buen sabor de boca. Perfecta para llevar a la parienta y pasar un buen rato. Como el humor se divide a la mitad entre escenas chorras y frases ingeniosas, incluso esos amigos del Clan de los Orcos que solo saben escribir en lenguaje esemese se lo pueden pasar bien. Definitivamente una de las sorpresas de este año.

09/10


4 respuestas a “Morning Glory”

  1. Pues ya me tenía buena pinta, con este comentario mucho más, habrá que verla. De Diane Keaton la última que vimos fue «Cuando menos te lo esperas» con Jack Nicholson y me pareció una pedazo película.