Ya ha pasado casi un mes sin noticias de las movidas en el laburo y en ese tiempo, siguieron afilando las guillotinas y hasta han cortado algunas cabezas. Todo esto, para los más despistados, es una saga que comenzó cuando aquello del preanuncio de la matanza y siguió un mes más tarde, en La falta de semana Santa, en la que desarrollaba los conceptos y nos habíamos quedado en Tres por uno hace también cosa de un mes. Justo antes de irme de vacaciones a Gran Canaria hubo una reunión en la fábrica para los que cuelgan del gerente de la misma, que no es mi caso y en la susodicha, cuantificaron en treinta y cuatro los julays que ponían en la puta calle, de un total de doscientos siete y los dividieron en dos mitades con diecisiete julays, una de currantes directos en la fábrica y otra de indirectos.
Yo me piré y al volver, tomando un cafelito con el mexicano, me entero que echan a una turca que entró hace casi un año y de la que yo dije desde el primer nanosegundo que la pondrían en la puta calle por tener contrato temporal y todos y cada uno me dijeron que no tenía ni puta idea de nada y que ella era la columna vertebral de la fábrica y jamás de los jamases la echarían, que antes ardería el cielo y resultó que su último día de trabajo es mañana porque no le pagan los días de vacaciones que le quedan y se los toma y ahora, a todos y cada uno de los que me informaron de mi ignorancia, los miro y como está prohibido escupirles a la cara, que es lo lógico y natural, aparte de dar cogotazos, les pido que se disculpen y que cuando no sepan de leyes laborales neerlandesas, que mejor se muerdan la lengua pese al riesgo a envenenarse con su estupidez. Esta es una de los diecisiete de la fábrica y en donde yo tengo mi escritorio hay dos turcos, una turca y una húngara para los que la cuenta atrás ya ha comenzado y ahora hasta esos han entendido que no hay salvación para empleados con contrato temporal, con lo que ellos serán cuatro de los catorce empleados indirectos, mientras que la otra era directa y así tenemos que faltan por saberse los nombres de trece directos y diez indirectos, o sea, veintitrés.
El joputa-terrorista-islámico de mi grupo ya no sale de su keli sin pañales de viejo para las cagaleras que tiene, que está viendo como su corte de compatriotas entre los que fardaba está siendo exterminada de raíz y él mismo se ve fuera, sobre todo porque no tiene arriolas para preguntar a mi jefe y se limita a lloriquear como moro en las esquinas. Como esta carnicería es a nivel europedo, en Portugal ejecutaron a una con la que yo trabajaba y hoy me enteré que en España le han hecho una oferta a otra con la que yo tengo muchísimo contacto, que me dijo que ella misma se ofreció voluntaria después de escuchar mis explicaciones, que me agradeció que le explicara los conceptos y como no todos los mayores de sesenta y dos a los que les ofrecieron paro de dos años y después jubilación anticipada lo aceptaron, ella se ofreció para el tema, con dos años de paro y tres de jubilación anticipada y la chamba aceptó hoy pagarle tres años de su sueldo casi completo y que se vaya a la puta calle al final de junio y ella feliz y los que rechazaron la jubilación anticipada, pensando que les harían una oferta mejor, esos están empezando a captar el concepto que no habrá ninguna oferta mejor y que rechazaron la caja con el premio gordo y les toca la caja vacía, que ahora se tendrán que quedar trabajando hasta que les llegue la edad de jubilarse y no pillarán un duro mientras que los que se van, lo hacen con una bolsa llena de dinero para vivir prácticamente cobrando lo mismo y rascándose los mondongos en sus keli.
Mi jefe, después de ver mis aciertos con los contratos temporales, que predije, con la gente que se ofrecería voluntaria, que también predije y con las jubilaciones anticipadas con oferta económica, que nuevamente predije, empieza a captar que en temas de reorganizaciones, todos los cafelitos que me tomé con el chamo del sindicato y los del comité de empresa de mi antigua multinacional japonesa me sirvieron de muchísimo y me gradué en el tema con una buena nota.
Al joputa-terrorista-islámico de mi grupo ya le ha llegado palabra que nosotros deberíamos dar ejemplo y quitarnos más lastre que los demás y pese a que de nuestro equipo jubilan a dos, que no estaría de mal convertirlo en un equipo al mil por mil cristiano y quitar las religiones de los que arderán eternamente en el infierno y la información le llegó con foto de la comida a la que yo invité a otro colega.