En el mejor blog sin premios en castellano, en el que todo está tripitidamente escrito y rescrito, ya conté en su día en junio del 2020 lo de El final del ciclo, cuando me pusieron en la puta calle y me echaron de aquella multinacional del país del sol caguiente, que después dos años después acabé en otra multinacional del país del sol caguiente, en la que estoy. Bueno, la mismita semana pasada, en Tres por uno, ya hablaba que ahora estamos en un más de lo mismo o algo así. El sábado, uno de mis antiguos colegas me manda por el güazá un mensaje con un anuncio super-hiper-mega secreto en el que aquella empresa del sol caguiente, que casualmente se muda este mes a un piso (o una planta) de un edificio minúsculo y aconseja a los cuatro gatos que le quedan trabajar desde su keli, han anunciado que al final del año, en el último minuto de la última hora del último día del 2024 será la última oportunidad para comprar sus productos en Europa y quien sea tan afortunado y compre alguno, tendrá servicio técnico hasta el último minuto del último día del mes de marzo del año 2026 y después de ese minuto, la empresa dejará de existir en Europa, Oriente y Medio y África y hasta en las Américas. Es decir, aquella multinacional con nombre de cuello dicho en inglés se va a tomar por culo, en enero del año que viene echan a la puta calle a los comerciales que les quedan, que seguramente pillaran compensación y después, los pobres curritos que aguanten hasta el último día, esos solo tendrán paro porque la empresa cerrará y no habrá indemnización para ellos. Es el final de su fracasada aventura europeda y gringa. La empresa dice que se concentrará en su mercado de viejos y avejentados, que el país del sol caguiente está conformado por gente chocheando y que básicamente no necesitan sus productos, así que les doy dos años antes de que también cierren el kiosco allí. Ya me parecía extraño a mí que gente que sabe que me cago y hasta me kago con ganas en ellos y en todos sus muertos, me mandaban invitaciones por el linquein para que conectemos y seamos amiguitos, y yo, que soy muy servicial y educo a la inteligencia artificial de esa güé, le pongo que no los acepto porque ni los conozco ni los conocí jamás y son chusma y gentuza de la peor, confirmados podemitas, truscolanes y suciolistas. Por desgracia para todos ellos, ninguno tiene mi número de telefonino privado y aunque lo tuvieran, yo tengo un doctorado en bloquear gente en los dispositivos móviles e inmóviles.
-
Inmersión nocturna en la playa de Tufia 4
Seguimos avanzando en esta inmersión nocturna en la playa de Tufia, muy cerca del aeropuerto de Gran Canaria y en esta volveremos a ver un tiburón angelote, otro que pillamos cazando y con el que hubo algo de acoso con las antorchas, que el pobre no sabía ya dónde meterse. La música es la canción Come What May de la película Moulin Rouge, el musical favorito de Virtuditas y en esta canción cantan a dúo y casi duolingo Nicole Kidman y Ewan McGregor.
Esto arranca directamente acercándome al tiburón angelote, que está quieto intentando pasar desapercibido, pero cuando llega a la conclusión que somos unos puñeteros, se marchó y aún así, tenemos más de un minuto de tiburón angelote al comienzo del vídeo y verlo nadar es de puro lujo. Después viene lo realmente interesante. Ese día, solo ese día, había como unas lombrices en el agua, la primera aparece sobre el minuto y veinte segundos y a partir de ahí veremos muchas más. Estaban en una zona concreta y a mí me dan una grima que no veas, que me recordó la historia aquella que no sé si era de Virtuditas o de Juan Cal-los el hijo de Feluca en la que cagaba en una lata de galletas danesas y guardaba el jiñote y cuando yo llegaba al campo a pasar el fin de semana venía el chiquito ilusionadísimo y abría la caja de galletas metálica para enseñarnos todas aquellas lombrices que tenía. Yo creo que mi madre me desinfectó con amoniaco y espíritu de sal ese día. Sobre el segundo minuto tenemos un erizo de mar muy activo con escolta de cangrejo araña o camarón, que no me queda claro e inmediatamente después tenemos una anémona, también escoltada por dos camarones o cangrejos. Tras esto pasamos por lo que ellos llaman cueva, pero que está abierta por varios puntos, así que más bien es un paso estrecho y de noche y con tanta gente, aquello parecía la puerta del Corte Inglés en primer día de rebajas.
-
Civil War
Esto es uno de los más grandes tocomochos que se recuerdan. Si miras el trailer y después vas a ver la película, te preguntarás si el trailer era de otra, porque tienen poquísimo o más bien nada que ver el uno con la otra. El tipo que hizo el montaje del trailer quería una peli de acción que no veas y el que montó la película quería un drama con tortilleras o así y con mucho momento de poner caritas y sin demasiadas batallas. Es lo que hay. La película se titula Civil War y en España se estrenó con el mismo nombre porque les dio miedo titularla truscoluña no es nación por lo próximo que está el tema para los españoles, que entre asesinos de la eta, suciolistas, podemitas y la gentuza truscolana, España sí que parece encaminada en esa dirección.
Unos julays viajan de Niu Yolk a Güashinton haciendo la ruta de las miserias.
Tenemos que el presidente gringo está en el poder por una tercera vez y se ha montado una guerra civil en el país y los de California y Texas vienen a por él. En Niu Yolk, un grupo de periodistas decide ir a parlamentar y hacerle fotos a ese presidente antes de que le den el tiro en la nuca y a ellos se les une una pava que quiere ser fotógrafa de prensa y que más bien parece bollera con ínsulas de camionera. Como no pueden ir por la ruta directa, van dando vueltas por el país, que está en guerra y se van encontrando todo tipo de movidas raras y la gente que se matan unos a otros, con muy poco o ningún chimpún.
Esto es una road movie de tres periodistas, un viejo gordo y acarajotado, un panoli que más bien parece un jacoso y una que apesta a lesbiana que no veas a los que se les une una joven que usa su chocho para conseguir lo que quiere, aunque sea una fracasada. Mientras van hacia la capital tenemos todo el dramote entre las relaciones entre ellos en el carro, que no se lo han robado y en cada parada, tiros, ataques y gente matando gente y estos disfrutando como cochinos y acercándose para verlo mejor o algo así, hasta que conectan con el ejército que va a atacar la capital de la nación y darle candela de la peor al presidente. Después se van todos a la Keli Blanca, entran porque no hay nadie en la puerta y hasta se encuentran con el presidente, que no sabe que es un cerdo y le ha llegado su San Martín.
Esto probablemente funciona mejor en gringolandia, que visto desde afuera, es un melodrama de periodistas convencional con ramalazos lésbicos de la trepa que está dispuesta a lo que sea para convertirse en fotógrafa, eso sí, sin estudiar, que ahora los influensers son así de fantásticos. La película entretiene un montón cuando estamos en las batallas porque mayormente nos olvidamos de los protagonistas y disfrutamos de la acción y aburre cuando se mueven de un escenario al siguiente. El final no me convenció para nada, me pareció que fueron a lo fácil y a explotar el ramalazo emocional y se cargaron a la única que realmente estaba actuando en la pantalla.
Esto aterrorizará a los miembros del Clan de los Orcos, que acudirán engañados pensando que es una peli de guerra. Por eso mismo encantará a muchos sub-intelectuales con GafaPasta, porque no es una peli de guerra. Para ver por la tele, si es que la ponen algún día.
-
La primera profecía – The First Omen
Esta es una un tanto rarita, que aunque muchos totorotas se puedan pensar que es la precuela de The Omen – La profecía, en realidad esa era un remake de la original de los años setenta y la que tenemos aquí es la precuela de la original, o sea, que esta se hace en el año 2024 pero sucede antes que las otras dos. Por supuesto estamos en el vapuleado y denigrado género del cine de terror y hoy tenemos The First Omen y en España se ha estrenado con el título de La primera profecía para recordarnos a todos que truscoluña no es nación.
Una julay pelandusca se va a Italia a hacerse monjita y se la empetan hasta los pelos de los güevos.
Tenemos que una cristalera se cae mientras la izan y mata a un curilla o algo así. Después llegamos a Italia, con una gringa que se muda allí porque quiere ser monja italiana y mientras espera que la ordenen, se va de juerga con otra monjilla y se enrollan con maromos y tal y tal y tal. Más tarde la pava se entera que está empreñada, le miran el coño dos gitanos y dicen que es más Virgen que San José, que ya es decir, que fue padre sin chingarse a María, que le hizo al pobre un séptimo y un décimo mandamiento y aun así, ha conseguido estar en prácticamente todas las iglesias católicas del universo conocido. Con la pava empreñada y todo el mundo en el monasterio en plan que llega el hijo de Dios o algo así, la pava nota cosas raras y pronto se da cuenta que allí hay un plan o algo parecido para traer un hijo de Satanás pero controlado por la iglesia para conseguir más parroquia o algo así y claro, aquello se desmadra que no veas.
Lo mejor de la peli es el aspecto a peli de los años setenta y la ciudad de Roma. Todo eso es fabuloso. La monjilla está bien, pero es que hay ahora mismo otra peli en cartelera con básicamente, la misma trama o muy similar y para mí que ambas acaban con la misma puntuación. Hay algunos sustos, sobre todo al final y abundancia de efectos especiales, pero le falta la magia de la peli original. Aquí tenemos el nacimiento del niño de la primera película, que ahora es la segunda película, que viene a ser el final de esta. En el convento hay un montón de movidas y alrededor del convento también. Todas esas tramas secundarias están muy mal llevadas y tenemos personajes que aparecen, parece que van a ser importantes y después desaparecen y cuando ya ni te acuerdas de ellos vuelven a regresar por medio minuto o así. El guion es demasiado caótico, aunque a mí, en el cine de terror, lo que me preocupa es que me den sustos a tutiplén y aquí van algo escasos.
Cualquier oportunidad para los miembros del Clan de los Orcos de magrear a sus hembras en un cine es buena, así que deberían ir a verla. No es un plato para los sub-intelectuales con GafaPasta.