Tras descansar una hora, algo que se hace para eliminar una cantidad significativa del nitrógeno que adquirimos durante la inmersión, regresamos al agua para la segunda. En este caso y como ya habíamos ido por las grandes planicies de arena del puerto de Sardina, nos dirigíamos hacia el este, a una zona más rocosa. Aunque creo que en esta inmersión vi muchas menos cosas que en la anterior, realmente esta me pareció aún más fabulosa. La música que acompaña a este clásico es de la banda sonora de ese otro clásico llamado Top Gun: Maverick, la canción You’re Where You Belong / Give ‘Em Hell, que muestra el sutil drama interior de los pilotos antes de una misión en la que saben que pueden morir.

Comenzamos por las rocas cercanas al dique, que vemos rocas grandes en el suelo que son las que echaron cuando lo construyeron. Yo siempre que veo arena presto atención por si hay algún chucho o tiburón ángel. Llegamos a un sitio en el que hay un bonito y pequeño arco y seguimos buscando chuchos aunque lo que vemos son fulas y otros bancos de peces de todo tipo que yo, con mi ignorancia altamente conocida, no puedo identificar, incluyendo un grupo de esos que rastrean la arena en busca de comida y que son tan chulos. Vemos la fauna de la zona y en algunas ocasiones nos encontramos con grupos grandes de peces. Nos cruzamos alguna vieja, no de esas como alguna comentarista, sino de los peces llamados así y que se comen, al menos en las Canarias. Acabamos con un banco de peces que pasaba por la zona.

La inmersión continúa en Segunda inmersión en Sardina del Norte, segunda parte