Llevo unos cuantos días pensando como abordar el tema de hoy y lo cierto es que no tengo muy claro como quedará. Si hubiese escrito esto hace una semana habría sido mucho más directo y agresivo pero empiezo a creer que no merece la pena. Aún así, quiero recordaos algunas cosas y fijar unos cuantos conceptos que igual andan algo difuminados.
Todo lo que viene a continuación es a cuento de un texto aparecido en una de esas páginas de refritos y noticias variadas que han florecido como setas en los últimos tres años y que se esconden bajo el disfraz de bitácoras. Se trata de una página monotemática de noticias sobre, por y para homosexuales y en ella, uno de sus doctos autores me tachaba de homófobo además de despacharse a gusto juzgándome después de haber leído una o quizás dos anotaciones de las más de dos mil que hay publicadas en Distorsiones. Ya que aquí se trata de juzgar basándonos en un mínimo de conocimiento yo también haré lo mismo. Después de correr al baño a vomitar del asco que me produjo leer esas calumnias infundadas sobre mí concluí que quien lo hizo es un talibán acebista, un extremista que esparce odio allí por donde va. Ese tiparraco es un heterófobo, odia todo aquello que no es como él y pretende remodelar el mundo a su imagen, lleno de machos, todos con su opción sexual que parece ser la única aceptable y exterminar a las mujeres de este planeta. Ni conozco la historia de ese julay ni he leído más allá de los insultos a mi persona ni me interesa conocer su vida y milagros. Supuestamente me denunció y yo asumí que la palabra la usaba significando Dar a la autoridad judicial o administrativa parte o noticia de una actuación ilícita o de un suceso irregular pero tras una semana y media sin recibir nada en mi casa me temo que más bien se trata de Noticiar, avisar, de informar a su Sanedrín de lectores homosexuales para que se guarden muy mucho de mi y de aquellos que como yo no comulgamos con ellos.
En su execrable escrito había algo que sí que me molestó sobremanera. Lo acompañaba de una de las fotos que yo publiqué sobre el AGP 2007. Mis fotos están hospedadas en flickr y la licencia de todas ellas es Todos los derechos reservados. Lo hago porque me he cansado de ladrones sin escrúpulos que agarran lo que encuentran por ahí y lo usan a su antojo y este parece ser un pájaro de esos. Se pasó por el forro el tipo de licencia y robó una foto y esta es una acusación porque yo no recuerdo haberle concedido el permiso para usar y manipular ninguna de mis fotos y si hay algo de lo que podéis estar seguros es que jamás lo haré. Así que el talibán heterófobo que me denuncia se nos revela como un vulgar ladrón de mierda, alguien a quien se puede acusar de robar y quiero que por acusar se entienda Imputar a alguien algún delito, culpa, vicio o cualquier cosa vituperable. Me gustaría creer que tiene la hombría de borrar esa foto pero ya se sabe que los delincuentes son más proclives a la reincidencia e imagino que hoy estará robando en otras páginas, o quizás en el supermercado, o en la tienda de la esquina porque el ladrón practica su oficio en todos los niveles de su vida.
Otro detalle que me molestó fue su asombro por la cantidad de personas que puedan venir a esta bitácora a leer su contenido. Al parecer si escribes para los de tu gueto tienes derecho a millones de visitantes y si escribes una bitácora personal no debería leerte nadie. Esto viene de un tipo que se vende en una bitácora comercial, una especie de chapero de la red porque su objetivo es ganar dinero, no escribe gratuitamente, busca su beneficio propio y lo hace a costa del trabajo de los demás, robando fotos ajenas y sobre las que no tiene ningún derecho para sacar tajada y beneficio. Al parecer el enlace con el que completaba su denuncia aportaría un montón de tráfico a esta pobre y miserable bitácora pero al mirar las estadísticas he visto que no fueron más de cien páginas adicionales en un lacónico sábado de finales de agosto. En fin ??
Pasando página sobre el tema aprovecho para refrescar la memoria a los que leen Distorsiones desde hace poco y recordaos que esto no es más que una bitácora, un sitio electrónico personal, actualizado con frecuencia, donde alguien escribe a modo de diario o sobre temas que despiertan su interés, y donde quedan recopilados asimismo los comentarios que esos textos suscitan en sus lectores. Ni más ni menos. El lugar se llama Distorsiones y para los que no terminen de comprender el significado de la palabra, el RAE define distorsión como la Acción de torcer o desequilibrar la disposición de figuras en general o de elementos artísticos, o de presentar o interpretar hechos, intenciones, etc., deformándolos de modo intencionado.. Más claro agua. Aquí no se cobra la entrada y a quien no le gusta es libre de seguir su camino igual que yo hago de juez parcial y borro aquello que no me gusta y que alguien deja en mi página. Esta bitácora existe desde el año 2000, primero como lista de distribución de correo y luego en el formato actual. Es una ventana a un mundo que yo veo de una forma o de otra, una mirilla por la que se asoman algunas personas y ven aquello que yo enfoco, ya sea una foto, un relato, un comentario de cine, un viaje o cualquier cosa que se me ocurra. En estos siete largos años se ha hablado de muchas cosas y me han acusado de homófobo, misógino, racista, clasista, inculto, pedante y de todo aquello que se os pueda ocurrir. Yo no limito mi imaginación ni tengo una mente tan estrecha que he de hablar todo el tiempo del mismo tema. Me gusta no saber lo que voy a escribir mañana o la semana que viene y dejo que las mareas de mi insensatez sean las que me guíen. Lo que el puto ladrón de mierda ignora es que aquí entran hombres y mujeres porque les da la gana y yo soy el primero que no está interesado en saber su orientación sexual. Sé que los hay de todos los palos porque entre mis amistades hay gente de múltiples continentes, de razas distintas, con colores de piel diferentes y que en su dormitorio hacen lo que les da la gana y con quien les da la gana sin que ello sea motivo de discriminación y la mayor parte de esas personas leen mi bitácora.
Esta no será la última vez que tengamos que tratar el tema porque los talibanes acechan por todos lados y la certeza de poseer la verdad absoluta les puede. Si hay alguien que aún no sabe lo que puede encontrar por aquí le sugiero que mire a la parte superior de la página y lea la frase que hay debajo del título: Nada es lo que parece. Si careces de imaginación te sugiero que sigas tu camino porque aquí no encontrarás aquello que estás buscando.