Distorsiones

Hoy tenemos la saga más absurda y rara que hay en los cines holandeses y que comenzó en el 2015 con Bon Bini Holland y continuó el año pasado durante la pandemia truscolana y podemita con Bon Bini: Judeska in da House. Estas películas han evolucionado un montón y comenzaron como carne del Clan de los Orcos y ahora los que van a verla son los adolescentes, que adoran el exceso de todos los personajes. Hoy llegamos a la tercera entrega, con un poster que es calcado de las otras dos y nos prometen muchísimo más de lo mismo. Se trata de Bon Bini Holland 3 y al igual que las anteriores, jamás de los jamases, ni en este ni en ningún universo del multiverso, se estrenará fuera de los Países Bajos y las Antillas neerlandesas.

Un puñado de julays se van a hacer las américas a niu llolk, absolutamente sin chimpún.

Al parecer un gringo quiere comprar el FC Kip, el restaurante de comida rápida en el que trabaja esta panda y Robertico miente y se hace pasar por el dueño y se los llevan a todos a América para entrenar a los empleados y para que Robertico firme el contrato de venta. Allí todo se irá al carajo y acabará pero que muy mal, como siempre, aunque ellos no dejan de reirse y al final tienen su final super-hiper-mega feliz.

Igual es que la idea se les agotó o que la han hecho demasiado deprisa y sin tiempo para que la anterior macere un poco en la memoria, pero este tercer episodio se queda corto, las bromas brutales suenan a muy conocidas, las polladas de Judeska, que también es el actor que hace de Robertico y de Gerrie ya no tienen la frescura anterior y todo se te antoja muy estirado para encajar. Lo de llevar a parte del grupo a América no aportó grandes momentos pero además, separaron a todos y dos se piran a un crucero y otros no se sabe ni donde están y al intentar crear líneas paralelas de historia, la cagaron mayormente. La película se descompone en un momento determinado pero en el tramo final consiguen enderezar la trama y al menos la parte final es totalmente absurda, divertida y seguramente los coloca en el lugar en el que harán la cuarta parte, pero definitivamente esta quedará como la peor de la serie.

Esto es cine hecho para los miembros del Clan de los Orcos, pero con los cambios, dudo que salgan contentos del cine. Definitivamente puede provocar la muerte instantánea de cualquier sub-intelectual con GafaPasta que se aventure en un cine a verla.

Lo de hoy no hay manera de explicarlo o lo que es peor, de comprenderlo, porque esta es una piedra en la que llevo tropezando más de diez años, o más concretamente, doce, que en el 2010 le di un 1 a Gru, mi villano favorito – Despicable Me, película que me pareció una puta mielda del copón y aún así, en el 2013 fui a ver Gru – Mi villano favorito 2 – Despicable Me 2 y le puse un 7. En el 2015 vi Los Minions – Minions y esta acabó con un 3, de nuevo, en la zona de puta mielda del copón y pensé que lo habíamos dejado en el 2017 con Gru 3. Mi villano favorito – Despicable Me 3, a la que le volví a poner un 1. Puedo confirmar y confirmo que en casi todas estas películas me he dormido en la sala de puro aburrimiento y eso que son pelis de noventa minutos o menos. Está claro que no aprendí nada ya que sin poder justificarme, he ido a ver Minions: The Rise of Gru, que en España se ha estrenado como Minions: El origen de Gru y aquí retrocedemos a un pasado muy lejano y honestamente, que no queríamos ver.

Un julay joputa tiene una infestación de truscolanes y podemitas en su keli, sin chimpún

Resulta difícil resumir la trama de un producto tan altamente intelectual pero vamos, que el puto niño ese asqueroso y con nariz de consolador tiene el sótano de su keli lleno de ratas amarillas y quiere convertirse en uno de los miembros de una banda de rateros. Cuando lo rechazan, les roba algo y después no se sabe muy bien que pasa porque quizás estaba durmiendo.

Tengo clarísimo que en la puerta del cine deberían obligarte a apagar tu cerebro antes de entrar a ver estas películas ya que no requieren de ninguna actividad neuronal. Esto es un desvarío sin pies ni cabeza lleno de las bestias amarillas que hablan mezclando palabras de todos los idiomas, con prevalencia del inglés, seguido del español, aunque también usan palabras del italiano, alemán e incluso neerlandés, que cada vez que soltaban una de esas, la gente en el cine se emocionaba hasta las lágrimas, por una puta palabra que no significa nada en una historia que está tan mal escrita que yo ya voto para que envíen a los guionistas a Arabia Saudita y que allí les den candela de la peor y los ejecuten, que eso es algo que les mola mazo a esa chusma y gentuza. Sin guion, con una animación mediocre y llena de los bichos esos gritando y diciendo tonterías, no hay nada bueno que se pueda decir de esto. Probablemente funciona maravillosamente con bebés y niños pequeños, que igual tienen sus cerebros sintonizados en esta onda de majadería.

Si eres un miembro del Clan de los Orcos, esto debe ser como un clásico para ti y lo irás a ver con la hembra y las bestezuelas y saldréis del cine aullando y flipando en colores con otro clásico. Cualquier sub-intelectual con GafaPasta hará bien huyendo de la zona y no regresando en unas semanas.

El preestreno sorpresa de la semana, después del apagón por culpa de la pandemia podemita y truscolana, regresó pero mutilado, ahora es cada dos semanas (o más, que no siempre sucede) y además, ahora las películas que eligen son o totalmente desconocidas por los seres humanos, o se estrenan al día siguiente, con lo que le quitan en gran parte el encanto. Aún así, nosotros los fanes seguimos yendo al cine y en muchas ocasiones, sufriendo unos pallufos que te camban la peluca, a menos que tengas una pelambrera fabulosa como yo. Se ha vuelto muy normal ver como se va media sala cuando se sabe qué peli es. Suma a eso que el foro y el istagrame en el que filtraban los títulos están desaparecidos porque echaron a esos empleados. El último de estos preestrenos y quizás el último hasta septiembre se titula Press Play, solo se ha estrenado en Alemania y los Países Bajos y es más que probable que vaya directamente a alguna plataforma en el resto del mundo. Desconozco el título para España pero esto tiene pinta de llamarse truscoluña no es nación.

Una julay se queda sin chimpún cuando se le muere el maromo y rebobina para seguir chingando con él como una coneja.

Resulta que una pava conoce a un chamo que es el hermanastro de su mejor amiga y se encoña con él. El pavo le está haciendo una cinta de cassette con mezcla de canciones y en cierto momento muere atropellado. La chama se traumatiza y cuando va a escuchar la cinta, descubre que cada vez que oye una de las canciones, viaja hacia atrás en el tiempo, así que se pone a buscar la forma de cambiar el futuro para que él no muera y que le vuelva a dar candela de la mejor. Esos amagos, en lugar de mejorar el futuro, lo van cagando y cada vez es que hay más gente muerta en el futuro y todo va a peor y ella que no gana para comprar pepinos en el super del barrio. O algo así.

Esto es un telelefilm de toda la vida, que estrenaron en el cine por rellenar lo del estreno sorpresa y que probablemente llegará a las pantallas regulares. Es una peli de ciencia ficción mezclada con romance pero es que no cuaja demasiado porque la pava no resulta para nada creíble, ni me creo el romance ni me creo sus patrañas de viaje en el tiempo y es que además, es que la caga continuamente con sus manejos, que uno pensaría que después de tropezar en la misma piedra dieciocho veces ya habría aprendido pero no, esta es lerda para foto en la güiquipedia, que merece que la reconozcan y la gente la salude en las calles. Casualmente, el maromo que la tiene tan desarretada es Lewis Pullman, más conocido para los expertos y fans de Top Gun: Maverick como Bob, que este es el que se sienta en el asiento trasero del avión de Phoenix, la pava piloto. Al final, cuando llegamos a nuestro final feliz, los ochenta y cinco minutos que dura la peli los has sentido como si fueran dos horas y cuarto. Entretiene, pero nada más.

Si eres un miembro del Clan de los Orcos o un sub-intelectual con GafaPasta, no hay nada en esto para ninguno de los dos grupos. Un telefilm para una tarde de sábado en Antena Triste o Telajinco.