Distorsiones

Mi último día completo en Gran Canaria coincidía con el que han elegido en una de las cadenas de multicines para poner cine en versión original, así que aproveché para ir a ver una película que venía presentada por un director famoso y que tenía como protagonista a Oscar Isaac, que desde que hizo del Duque Leto en Dune parece que está hasta en los botes de sopa. La película se titula The Card Counter y en España han optado por la traducción literal y se titula El contador de cartas.

Un julay trapichea con el póker tratando de olvidar que es un cabroncete que no veas y primo hermano de puerkagón el desHonorable.

Un pavo que al parecer trabajó en los grupos esos de gringos que torturan chusma y gentuza de la peor y mayormente terroristas-musulmanes-de-mielda en cárceles fuera de su país, sigue traumatizado con todas las cosas que hizo y disfrutó tanto y ahora, después de haber estado en la cárcel por aquello, está en el circuito del póker y le va bien. Conoce a un chamo joven que quiere vengarse del mismo que lo entrenó a él y que mató a su padre y el chamo como que adopta al joven y lo intenta reformar mientras entra en la liga de los grandes campeones de póker o algo así y allí todos cuentan cartas, que al parecer es el deporte auténtico, no el juego en sí.

Esta es una película que funciona a ratos muy bien y a ratos fatal. Lo de las escenas en las que vemos como torturan a la gente no funcionó nada porque como que el director le quiso dar algo de artisteo y la caga. Tampoco funciona muy bien Tiffany Haddish, que es una gran actriz pero que aquí como que no pega ni con cola y parece más bien una verdulera jinameña. Al final todo se centra en Oscar Isaac y en los traumas con los que apechuga y esa es la mejor parte, el resto es un poco flojillo y a ratos malo. Y hablando de malos, el malo lo interpreta Willem Dafoe definitivamente pasado de rosca. Lo intentaron tanto que al final lo que les salió fue un telefilm.

Esto seguro que mola a la gente que les gusta las pelis de poker, pero por lo demás, no creo que interese ni a los sub-intelectuales con GafaPasta ni a los miembros del Clan de los Orcos. Carne de telelevisión.

La de hoy es la única película que vi mientras estuve en Gran Canaria durante las navidades que no fue en versión original, sino doblada al español. La razón es que ya me venía esa semana y sabía que los cines neerlandeses están cerrados, así que opté por ver una en la que no conozco a ningún protagonista, no reconozco sus voces y por lo tanto, no me afecta. Era una peli de espías alemana titulada Nahschuss en su versión original y en España se conoce como El espía honesto, que ya por el adjetivo que usan, excluyen a truscolanes y podemitas de los posibles candidatos.

Un julay medra como funcionario haciendo de truscolán

Al parecer, esta es la historia del último hombre que fue ejecutado en la República Democrática de Alemania antes de que cayera y fuera absorbida por los alemanes buenos. Comienza con un chamo que quiere una cátedra para tener trabajo de por vida pero que en el gobierno le dicen que para conseguir la cátedra, primero tendrá que currar para la Stasi y una vez dentro, verá como manipulan y matan a destajo y como son una casta podemita y truscolana que pudre el país, como en España, vamos. Poco a poco su vida se irá yendo a la mierda y llegará un momento en el que lo que le obligan a hacer será demasiado y buscará una salida.

Comentar como de pasada que aparte de Alemania, España es el único país del universo en el que se ha estrenado, que es algo que me resulta fascinante. Decir que la peli empieza en plan espectacular, con el chamo en pelotas a punto de chingarse a la pelleja de su novia, con lo que en los dos primeros minutos ya le hemos visto el paquete y a partir de ahí, dos horas, que en algunos momentos se hacen muy aburridas. La historia seguramente es interesante pero es que la estiraron muchísimo y repiten escenas a porrillo. Esto es más bien una especie de telefilm y para cuando estamos llegando al punto en el que tienen que resolverla, y desde el principio sabemos que ese chamo es el último hombre asesinado por el gobierno comunista antes de caer, aquello no parece avanzar pero que nada y de repente, se les acabó la guita para hacer la peli y lo mataron en tres segundos, pero así, de golpe, que eso sí que fue una alegría porque nos permitió marcharnos a casa.

Esto se lo pones a un miembro del Clan de los Orcos y se te rechifla todo y te ataca. Seguramente algo parecido le puede suceder a los sub-intelectuales con GafaPasta. Vale como telefilm para matar la tarde y combinar con siesta si lo ponen en AntenaTriste o Telajinco.

Lo de hoy es algo que no me puedo ni quiero explicar. Hemos visto no hace tanto Kingsman: Servicio secreto – Kingsman: The Secret Service, que fue un peliculón y Kingsman: El círculo de oro – Kingsman: The Golden Circle que también fue muy buena y ahora, en lugar de seguir con la serie, se sacan una precuela que no cuela en la que nos cuentan los orígenes de la organización o algo así y centrada en cienes y cienes de millones de segundos antes. Esta cosa se titula The King’s Man y en España se estrenó como The King’s Man: La primera misión.

Un julay pollaboba y sin mondongos, le jode la vida a su hijo y después se enrabieta todo pa’l coño.

Resulta que hace la tira de tiempo, un pollaboba brexitiano decía ser pacifista o algo así y le mataron a su mujer que era la tonta del bote. Entonces el chamo cría a su hijo pero no le deja oler chochos y el chiquillo desde que puede se le escapa, se enlista para ir a la Primera Guerra Mundial y el muy gilipollas como que la caga allí. Después papuchi se amarga todo y decide vengar a su hijo o algo así pero como es pacifista, lo hace matando con armas de fuego y luchando contra una organización que como siempre, quiere dominar el mundo, el universo y hasta truscoluña, que no es nación.

Mira que lo tenían fácil viniendo de dos películas buenas pero consiguieron cagarla y hacer una película de acción aburrida y en la que el trailer, engaña y vende otro producto. Viendo el trailer, yo pensaba que Rasputín y el chaval joven, que se maman el trailer prácticamente al completo, eran protagonistas principales y chupaban pantalla por un tubo. Pues va a ser que no. Rasputín muere en su segunda escena, sin pena ni gloria y un rato después desaparece el chaval y nos quedamos con los aburridos y acarajotados en una película de ciento treinta minutos a la que le sobran al menos cuarenta. La historia carece de interés y las escenas entre peleas se hacen eternamente soporíferas. Para cualquiera que haya leído algo de historia en la contraportada de un libro, aquí se la pasan por el forro del culo sin vergüenza alguna y lo peor es que esa historia alternativa, no sirve para hacer una historia de acción entretenida, solo sirve para aburrirnos hasta la saciedad. Vale la pena mencionar lo mal, pero que mal que sale Ralph Fiennes, que debe estar muy necesitado de leuros porque no mostró el más mínimo interés en las horas y horas de cámara que tuvo.

Si eres un miembro del Clan de los Orcos, no te dejes engañar por el trailer, esto no es para ti. Si eres un sub-intelectual con GafaPasta, el trailer ya te indica que esto no es para ti. Para ver si lo ponen gratis por la tele y no hay ninguna cosa interesante que elegir.